La crisis económica se expone en las vidrieras de Rosario donde a dos semanas del inicio del invierno ya se promocionan las ofertas que, generalmente, se concretan a final de la temporada. La necesidad de los comerciantes de hacerse de dinero para pagar cuentas y sueldos en medio de un descenso de ventas es la razón de esta “barata” anticipada.
El titular de la Asociación Empresaria de Rosario, Ricardo Diab, confirmó en Radiópolis, el programa que conduce Roberto Caferra en Radio 2, que la liquidación de final del invierno se anticipó en los comercios locales. “No nos sorprende por la situación económica que estamos atravesando”, expresó.
Diab advirtió que en los últimos años “se ha ido adelantando pero no a este extremo que se hace en el inicio de la temporada”, planteó sobre el lanzamiento de las ofertas. “Hemos tenido 18 meses consecutivos negativos con falta de liquidez y existen compromisos por delante por lo que aún teniendo stock, los empresarios y dueños de negocios liquidan para hacerse de efectivo, no sólo para comprar la nueva ropa sino para afrontar los costos”, indicó y apuntó: “Algunos están pagando todavía el aguinaldo”.
Según el dirigente, la industria de la indumentaria y el calzado “son rubros que siempre han padecido la negatividad del consumo” al tiempo que remarcó: “Hay pequeños negocios que han cerrado, más allá de las marcas que ya están instaladas”.
Consultado sobre algunos comentarios favorables hacia el sector, señaló: “La opinión de algunos comerciantes es que esto mejora pero no se soluciona nada, sólo se puede notar una mejora en comparación al mes pasado. También podemos decir que el Ahora 12 trajo mejoras pero no soluciona los problemas de caja”, lamentó.
Locales vacíos
Un informe de la Concejalía Popular determinó a principio de año que en la ciudad de Rosario hay unos 3.900 locales comerciales ociosos. El estudio determinó que de ese total, unos 300 se desocuparon en el último trimestre. Nire Roldán, titular de la ONG de defensa de los inquilinos, destacó que “más de 138 esquinas emblemáticas de la ciudad están ociosas” y remarcó que la tendencia de cierre de locales se acrecentó desde 2015 cuando los espacios ociosos eran alrededor de 1000 en Rosario.