El pasado 24 de junio en el barrio santafesino de Santa Rosa de Lima, una mujer de 45 años y su nieta de un año y medio resultaron gravemente heridas luego de que dos pitbulls las atacaran. La beba sigue internada en estado reservado. 

Jaqueline, la abuela de la menor, fue dada de alta en las últimas horas y dio detalles en De 12 a 14 (El Tres) sobre el hecho y contó que "lo único que quería era que no tocaran a la nena". "Si yo la soltaba, se la devoraban", recordó entre lágrimas.

"Estoy un poquito mejor, pero por ahí tengo muchos dolores", explayó. Según describió, las mordeduras en la cabeza "le mataron algunos nervios", como así también le perjudicó la visión.

"La herida más profunda fue en la cabeza, doy gracias a Dios que no me tocó la sien", contó. "Sentía cómo me mordían cada parte de mi cuerpo, no me puedo borrar esa imagen. Me aferré en apretar a la nena con mis brazos. La abracé mientras los perros me mordían", recordó. 

Sobre el dueño de los canes —detenido en las últimas horas—, contó que "no se acercó a disculparse en ningún momento". 

La audiencia imputativa se llevó a cabo este miércoles al mediodía y según precisó el fiscal Omar de Pedro al móvil desde Santa Fe a El Tres, "le atribuyeron la figura dolosa". "Lesiones gravísimas dolosas y lesiones graves con dolo eventual, se podría haber evitado", precisó y sumó: "Prevé una pena de tres a 10 años".

Asimismo, se refirió al lugar donde se encuentran los dos perros. Lo cierto es que los canes están en la sede de la policía ecológica, pero De Pedro sostuvo: "No hay lugar a donde poner este tipo de animales".

Los pitbulls que atacaron a Jaqueline y a Catalina, quien pelea por su vida, "no estaban vacunados, ni inscriptos en el registro de animales peligrosos".