“Una verdadera película de terror”, así calificaron desde el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social de la Nación, a la escena que se encontraron en un campo ubicado en Estación La Carolina, un paraje a unos 20 kilómetros de Rosario. En el lugar rescataron a una familia y otros dos trabajadores rurales que habían llegado engañados al lugar.
Según detalló en Radiópolis (Radio 2), Christian Recchio, director de la región centro del Ministerio de Trabajo, decidieron realizar una inspección tras recibir una denuncia de la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores.
“Nos encontramos con una pareja oriunda del norte provincial que tenía a tres chiquitos de entre cuatro y dos años y a otros dos trabajadores, uno de Corrientes y otro de la zona. “Llegaron engañados porque les habían ofrecido trabajo digno a través de redes sociales”, remarcó el funcionario.
Al arribar al lugar, los inspectores del Ministerio de Trabajo detectaron que los peones rurales estaban viviendo en condiciones inhumanas. “Estaban en un semirremolque que hacía las veces de casa donde no tenían baño y el agua que tenían para tomar era la misma que la de los animales en los tanques”, detalló Recchio.
Durante la intervención estatal se acercó al lugar el responsable de explotar el campo quien intentó justificar las condiciones en las que estaban viviendo los trabajadores rurales. “En un momento le reclamamos la falta de baño y la respuesta del encargado fue que él había traído los materiales para que se lo construyan los propios trabajadores «¿o pretenden que se los haga yo?”», nos preguntó”.
Con respecto al origen de la denuncia, Recchio explicó que fue hecha por uno de los trabajadores rurales que había sido echado por parte del arrendatario luego de exigir mejores condiciones para vivir junto con su familia. “Los animales que cuidaban eran más importante que ellos”, reconoció.
Por toda esta situación, se elevó una denuncia ante la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas que derivó la causa a la Fiscalía Federal N° 1 de Rosario. Inmediatamente la Justicia dispuso el rescate de los trabajadores y sus familias.
“El hombre de Corrientes se pegó la vuelta y la familia del norte provincial fue reubicada en otro empleo por la zona con un lugar en condiciones para poder vivir. Además, como lo habían echado por reclamar condiciones, el ex empleador aceptó pagarle una indemnización”,sostuvo.