Buena parte de los radares que controlan la velocidad máxima en Rosario fueron retirados en las últimas semanas y siguen sin ser reemplazados.
Según una recorrida que realizó un equipo de El Tres, los puntos de control sobre la costanera rosarina fueron removidos desde el Parque Urquiza hasta la zona del Serrucho en la zona norte.
En Colombres y Washington, la columna que soportaba el radar está vacía y solo quedó el retardador de velocidad sobre el asfalto.
Algo similar ocurre con el punto de fiscalización sobre el Anfiteatro Humberto De Nito, en ambas manos, en Oroño y el río, o en Cándido Carballo y Rawson; en un virtual recorrido de sur a norte.
A esos puntos de control de la velocidad máxima, que suele ser de 60 kilómetros por hora en las avenidas, se suman otros radares retirados de Presidente Perón y Rouillón o en Eva Perón a la altura del complejo de cines, en la zona oeste.
Lo llamativo es que los equipos no fueron reemplazados ni relocalizados en otros puntos. Según informó De 12 a 14, esa ausencia se explica que en una de las dos empresas a cargo de mantenimiento de semáforos y controles por infracciones se retiró de la ciudad y se llevó buena parte de la infraestructura instalada.
Desde la Municipalidad señalaron que el proceso de reemplazo debe realizarse mediantes nuevos pliegos para luego poder hacer un nuevo llamado a licitación de ese servicio.