La cantidad de cortes de tránsito por piquetes y manifestaciones en Rosario se redujo casi un 40% durante el primer semestre de este año en comparación con el mismo período del 2023, según datos del Centro integrado de operaciones (Cior).
El dato fue destacado por el secretario de Control y Convivencia municipal, Diego Herrera, quien enumeró las razones por las cuales se redujeron los cortes.
"En el período que va de enero a junio del 2024 tuvimos un total de 103 cortes de tránsito por marchas o manifestaciones", mientras que en el mismo período del año pasado hubo 167, dijo este sábado en diálogo con El mejor día de la semana (Radio 2).
Entre los factores que ocasionaron esta baja, Herrera destacó el hecho de que "la contención social por parte del Estado, a nivel municipal y provincial, sigue existiendo a pesar de los recortes aplicados por Nación".
Y agregó: "También creo que tiene que ver la discusión que se instaló a partir de la implementación del protocolo antipiquetes por parte del Ministerio de Seguridad" bajo la orden de la ministra Patricia Bullrich. Esto, indicó el funcionario, hizo que "cambiaran las formas de manifestarse".
Desde el Cior tienen contabilizadas las manifestaciones en las que se interrumpió total o parcialmente el tránsito, incluso cuando haya ocurido de forma intermitente.
Por otro lado, el secretario de Control destacó que "hubo otras manifestaciones, como por ejemplo en la plaza frente a la Municipalidad, que no implicaron ningún corte". Y enfatizó: "Eso tiene que ver con el cambio en las formas de manifestarse de los movimientos sociales y los sindicatos".
Al respecto, consideró que los cambios impulsados también por Nación y que han dificultado la financiación de las organizaciones sociales volvieron "más difícil trasladar a la gente a los puntos característicos de la ciudad" en los que suelen concentrarse los reclamos, algo que provoca que las manifestaciones empiecen a darse en los barrios.
A su vez, evaluó: "Es una buena noticia, porque para nosotros estas manifestaciones implican montar operativos especiales con mucha gente que, por lo general, no salen bien porque igualmente se generan embotellamientos, sobre todo en lugares como el microcentro, en donde es muy difícil organizar los desvíos".
Por último, Herrera concluyó: "Es necesario repensar cómo se manifiestan las organizaciones, porque hay un cambio de época en el que la sociedad está pidiendo otra cosa para convivir. Nadie niega el derecho a manifestarse, pero sí se pide que se haga de forma pacífica para que quienes quieran transitar libremente por la calle lo puedan hacer".