Es una Semana Santa muy especial la de este 2020. Por la cuarentena que determinó la pandemia del coronavirus, habrá estrictos controles para los conductores que se lacen a las rutas con fines turísticos o de reunión familiar, que se expondrán a fuertes multas, sanciones y hasta causas penales si así lo hacen. Por otra parte, este año no habrá restricción para los vehículos de carga pesada en las rutas y autopistas de la provincia.
En contacto con el programa Radiópolis (Radio 2), el director de la Agencia de Seguridad Vial de Santa Fe, Osvaldo Aymo, destacó que se encuentra “coordinando los 74 puntos de control en toda la provincia, con un gran esfuerzo de hombres y mujeres de nuestra fuerza, lleva mucho tiempo y trabajo”.
Respecto del contexto especial que tendrán estas Pascuas, apuntó que “nosotros creemos que la gente va a respetar el hecho de no viajar en esta Semana Santa”.
“Le pedimos a la gente que no se largue irresponsablemente a las rutas”, remarcó el director de los controles viales que rigen en Santa Fe actualmente.
Luego agregó: “Nosotros desde el Estado podemos hacer una ley, una campaña de concientización, podemos poner sanciones, pero nada se puede hacer si no hay conciencia y si no hay solidaridad”.
Y detalló cuáles son las sanciones a las que se exponen los que no cumplan con la ley: “El procedimiento es concreto; se le labra el acta correspondiente, se le abre una causa penal y va a ser castigado con toda la fuerza de la ley como establece el decreto presidencial”.
Y confirmó también que “el vehículo va a ser secuestrado”.
Camiones sin restricciones
Osvaldo Aymo comentó que “en esta Semana Santa tenemos la particularidad de que no hay restricciones para los vehículos de carga pesada, que están habilitados para circular”.
Por ejemplo, el director de la Agencia de Seguridad Vial destacó que “en Timbúes, ayer entraron más de mil camiones”.
Después subrayó que “se inauguraron dos plantas en la zona portuaria, por eso tenemos un mayor movimiento que en años anteriores más allá de la cuarentena”.
“Se les toma la temperatura a los choferes, por eso las largas colas de camiones son inevitables”, afirmó.
Por último, Aymo confió que “con la prolongación de la cuarentena todos los organismos de control estamos trabajando al límite de nuestras posibilidades humanas”.
“Tenemos personal, pero esto se va prolongando y el recurso humano se va gastando, se van casando”, finalizó.