Gracias al trabajo de un grupo de científicos del CONICET, se generó el primer estudio para determinar el origen de organismos marinos. La misma se basa en la variación de dos isótopos estables del Mar Argentino, derivado de muestras de pingüinos de Magallanes (Spheniscus magellanicus).

¿De qué manera funciona? Esta herramienta se basa en generar mapas que señalan la variabilidad en el Mar Argentino de dos isótopos estables (denominados isopaisajes), el isótopo del carbono (13C) y del nitrógeno (15N), y fueron generados gracias a estudios en la sangre de pingüinos nidificando a lo largo de toda la costa argentina. Dado que los animales incorporan estos isótopos en sus tejidos, estos mapas permiten estudiar la dieta y migración de los pingüinos.

“El fitoplancton de diversas regiones del mar posee distintos valores de isótopos que puede ser representados en “isopaisajes” y, dado a que los organismos están compuestos isotópicamente de lo que se alimentan, sus valores en distintos tejidos pueden ser utilizados para estimar su dieta o para identificar en qué región del mar se alimentan”, explicó Javier Ciancio, investigador del CONICET en el Centro para el Estudio de Sistemas Marinos.

La investigación fue llevada a cabo por, Julio Ciancio, Juliana González, Pablo Yorio y Noela Sánchez Carnero, todos integrantes del CESIMAR, y Esteban Frere, del Centro de Investigaciones Puerto Deseado de la Universidad Nacional de la Patagonia Austral (UNPA) y CONICET, con el apoyo de la fundación Wildlife Conservation Society (WCS).

Una herramienta para detectar el origen de organismos en el Mar Argentino

En este sentido, los isótopos pueden ser utilizados para determinar el origen de una diversidad de organismos, de productos de la industria pesquera como peces, calamares o moluscos, o para identificar las áreas de alimentación de otros predadores de interés para su conservación como aves, peces, mamíferos o invertebrados marinos.

En cuanto al trabajo de investigación, para construir el mapa se utilizaron muestras de sangre de pingüinos de Magallanes en etapa de reproducción que anidan en 11 colonias ubicadas desde Islote Lobos, en Río Negro, hasta Cabo Vírgenes en Tierra del Fuego, y que fueron colectadas a lo largo de ocho años.

“Dado que durante su etapa reproductiva los pingüinos acotan sus áreas de alimentación a las cercanías de la colonia, el valor de isótopos estables de su sangre refleja la composición de los mismos en dichas áreas. Los resultados mostraron una variación en el eje norte-sur en los valores de isótopos estables debido, posiblemente, a la productividad primaria y a las corrientes marinas dominantes”, agregó Ciancio.

Por otro lado, a partir de su uso para conocer la migración de varias especies, los isopaisajes generados también pueden ser utilizados para realizar trazabilidad de productos pesqueros o reconstruir las áreas de alimentación utilizadas por organismos en el pasado, por ejemplo, los preservados en colecciones de museos o hallados en yacimientos arqueológicos.