El sector empresarial argentino se enfrenta a un año lleno de incertidumbres, pero también de oportunidades. A pesar de los obstáculos actuales, los principales referentes de la industria mantienen una visión positiva para el futuro, confiando en que la recuperación económica llegará, aunque con matices. La baja de la inflación y la normalización del mercado son dos de los aspectos más esperados, y hay sectores que ya comienzan a mostrar signos de dinamismo. En este contexto, tanto el sector industrial como el agroindustrial se preparan para los desafíos venideros con apuestas estratégicas y apuestas de innovación.

El CEO de Gerdau, Guillermo Maglieri, asegura que “tenemos altas expectativas sobre el coloquio de IDEA, porque es un evento que congrega al empresariado argentino y se han trabajado muchas propuestas concretas para abordar la situación actual.” A pesar de un 2024 difícil, especialmente por la caída en la construcción y la industria, Maglieri confía en que 2025 traerá mejores resultados para su sector, impulsados por inversiones en áreas clave como el gas y la infraestructura.

El peso de la pobreza y la conflictividad social

Uno de los temas que más preocupa a los empresarios es el aumento de la pobreza y la conflictividad social. Según Maglieri, la situación es compleja: “Por supuesto que la pobreza preocupa y la conflictividad no es sana, pero estamos en un proceso de transición”. En su opinión, la clave está en fomentar el diálogo y generar consensos para minimizar los conflictos, aunque reconoce que lograrlo no es tarea sencilla.

“Por supuesto que la pobreza preocupa y la conflictividad no es sana, pero estamos en un proceso de transición” Guillermo Maglieri, CEO de Gerdau.

Desde la perspectiva del grupo agroindustrial Ledesma, Javier Goñi coincide en que la situación económica ha sido complicada este año, pero mira con optimismo hacia el futuro: “Este año ha sido duro, era parte de lo que sabíamos que iba a pasar, pero ya hay sectores que están empezando a tomar otro dinamismo. Yo soy optimista para 2025.” Goñi señala que uno de los mayores logros recientes ha sido la reducción de la inflación, que califica como “una de las cosas más inmanejables”.

El desafío de la competitividad

Ambos empresarios coinciden en que la competitividad es un factor clave para el crecimiento de sus industrias. En el caso de Gerdau, Maglieri explica que el contexto global impone la necesidad de adaptarse a los cambios: “Siempre tratamos de buscar competitividad. Lo que reclamamos son reglas claras, y cuando uno piensa en una Argentina competitiva, piensa en discutir cuestiones de costos.” Para Maglieri, la carga impositiva en Argentina sigue siendo un obstáculo significativo, ya que “exportamos impuestos”. Este sobrecosto afecta tanto a los productos que se importan como a los fabricados localmente.

“Muchas de las fábricas son competitivas adentro, pero las discontinuidades están puertas afuera” Javier Goñi, Gerente General del Grupo Ledesma

Por su parte, Goñi afirma que el enfoque en la eficiencia interna es vital para que las empresas argentinas puedan competir en el mercado global. Sin embargo, advierte que la verdadera batalla se libra fuera de las puertas de las fábricas: “Muchas de las fábricas son competitivas adentro, pero las discontinuidades están puertas afuera”. En este sentido, aboga por una desregulación y una reducción de impuestos que permita a las empresas mejorar su competitividad a nivel global.

Innovación y agregación de valor

Ambos líderes empresariales también destacan la importancia de la innovación como motor de crecimiento. Goñi subraya que Ledesma está constantemente invirtiendo en nuevos proyectos: “Todos los años invertimos entre 25 y 35 millones de dólares en renovación de maquinaria.” Una de las iniciativas más recientes de la empresa ha sido la inauguración de una planta para la producción de vajilla descartable a partir de la pulpa de caña de azúcar, en reemplazo del plástico de un solo uso. “Estamos en permanente innovación, es parte de nuestro ADN”, afirma Goñi, quien también señala que la tecnología y la biotecnología son fundamentales para agregar valor a los productos argentinos.

"Creemos que en 2025 veremos una recuperación lenta pero sostenida, impulsada por proyectos en el campo y en la extracción de gas” Guillermo Maglieri, CEO de Gerdau.

En el sector del acero, Maglieri ve un 2025 con mejores perspectivas, impulsado por las inversiones en infraestructura y en sectores como la minería. “Creemos que en 2025 veremos una recuperación lenta pero sostenida, impulsada por proyectos en el campo y en la extracción de gas”, asegura. Además, subraya la importancia de proteger el empleo y mantener una mano de obra calificada, incluso en tiempos de crisis: “Formar personal técnico capacitado cuesta mucho, y hemos sido prudentes en proteger ese capital humano.”

Expectativas para el futuro

A pesar de las dificultades, tanto Maglieri como Goñi mantienen una visión positiva para el futuro. “Aunque este año fue complicado, hay señales que indican que 2025 será mejor”, dice Maglieri. Para Goñi, el ordenamiento de la macroeconomía y la reducción de la inflación son claves para que Argentina pueda acceder a capital y dar el salto hacia una industria más competitiva a nivel global. “En la medida en que el país se ordene, el acceso al capital será más fácil, y eso nos permitirá dar un salto en términos de innovación y valor agregado”, afirma.

“En la medida en que el país se ordene, el acceso al capital será más fácil, y eso nos permitirá dar un salto en términos de innovación y valor agregado” Javier Goñi, Gerente General del Grupo Ledesma

Ambos empresarios están de acuerdo en que el futuro de la industria argentina depende de la capacidad del país para adaptarse a los cambios globales y mejorar su competitividad. Mientras Gerdau apuesta por una recuperación gradual de la demanda en el sector del acero, Ledesma continúa invirtiendo en nuevas tecnologías y en proyectos que buscan agregar valor a los productos agroindustriales.

El impacto en la región de Rosario

Finalmente, Maglieri señala que la planta de Gerdau en la localidad de Pérez, cercana a Rosario, también verá una mejora en 2025, gracias a la recuperación de sectores clave como la maquinaria agrícola y la industria metalmecánica. “La recuperación en la región estará apalancada por la mejora de estos sectores, y eso también impulsará nuestra actividad”, explica el CEO de Gerdau.

Con un enfoque en la innovación, la competitividad y el diálogo, ambos empresarios miran hacia 2025 con expectativas moderadas pero optimistas. Si bien el camino hacia la recuperación será lento y no exento de desafíos, creen que las bases están sentadas para un futuro más prometedor para la industria argentina.