Ariel "el Chino" Garcé fue el protagonista de una carrera futbolística que tuvo todos los condimentos. Salió campeón con River Plate, defendió la camiseta argentina en el Mundial de Sudáfrica 2010 y jugó en Colón, Rosario Central, Olimpo, Argentinos Juniors y Atlético de Rafaela. Alejado de la pelota y de las canchas, hizo un repaso sobre el deporte, el contexto que lo rodea y cuán fuerte pisa el machismo, la homofobia y la discriminación en este

El exjugador pasó por el programa Vuelta y media (Urbana Play), que conduce Sebastián Wanraich, y reflexionó: "No está permitido. Ha pasado en algunas partes del mundo, por suerte hoy mucho más, que hablan. Antes vos lo decías y si te borraban por eso, nadie se enteraba. Hoy quizás hay un cierto respaldo para mostrarte como sos y ser aceptado por todo el mundo".

"Casi todos los que hablaron eran cracks en sus deportes, porque sino te dicen «y encima juega mal»", contó. Asimismo, ahondó sobre la exigencia del deporte y la sensibilidad de los jugadores.

"Hay una mirada muy machista. Estuve mucho tiempo en un ambiente demasiado machista, donde hay cosas que nos ponemos a esquivar o ocultar. Si llorás, no jugás. La sensibilidad no va. No podés reconocer que tenés miedo antes de un partido. El técnico en vez de tratarlo, lo saca. Todos tenemos miedo, es parte de la construcción. El miedo por ahí viene de la infancia, de otro momento. Hay que abordarlo para llegar de una manera diferente. Tener herramientas para pararse en esa situación", sostuvo.

A modo de cierre, se sinceró y dijo que ahora se toma "más light" el fútbol. "No veo mucho. Sigo más a River, a Rosario Central, pero sin analizar. Quiero comprender los momentos de las personas que están jugando al fútbol".