Fernando, el automovilista que este lunes se ofreció para perseguir al delincuente que robó un utilitario, quedó internado en el policlínico Pami I de Sarmiento al 300 por un nuevo episodio cardíaco. Se espera que en las próximas horas, sea intervenido quirúrgicamente para la colocación de un stent.
El hombre de 63 años ayudó a Gerardo, quien sufrió el robo de su vehículo en Catamarca y Presidente Roca. Junto a su hermana y el damnificado realizaron la persecución por el centro rosarino hasta Urquiza y Oroño donde los dos hombres bajaron del auto para abordar al delincuente y la mujer llamaba al 911.
En medio de la adrenalina, Fernando –el conductor solidario– se descompensó y fue asistido por una ambulancia en el lugar de los hechos el mismo lunes por la tarde.
Inmediatamente se recuperó, pero este martes tras una nueva consulta médica quedó otra vez internado, según confirmó el periodista Pedro Levy en el programa Telenoche Rosario (El Tres).
Marcela, la hermana de Fernando, –quien también ayudó a Gerardo a perseguir al ladrón– dijo que no se arrepienten de lo hecho. “Hoy estuve con mi hermano y me dijo que lo hubiese perseguido hasta el final”, comentó la mujer.
Añadió además que este martes a la mañana cuando llegó al trabajo todos sus compañeros la aplaudieron y la felicitaron por haberse involucrado a pesar de lo riesgoso de la situación.
El hecho
Gerardo, es un trabajador que el lunes sufrió el robo de su utilitario en Catamarca y Presidente Roca. Fue ayudado por Fernando un vecino de 63 años y su hermana Marcela en una persecución por el centro rosarino. Al llegar a la esquina de Urquiza y Oroño, alcanzaron al delincuente que no pudo seguir su huida en el vehículo robado porque le cruzaron otro auto y además encontró el semáforo en rojo. Sin escapatoria y alcanzado por la víctima, el asaltante bajó del coche pero lo frenaron los insultos y golpes de vecinos. Quedó retenido hasta que llegó la policía y se lo llevó arrestado.
Gerardo el dueño del utilitario dijo que el auto se lo robó el hombre cuando lo vio bajar en un negocio: “Me empujó y no lo pude parar”, dijo el damnificado y añadió que en su desesperación se encontró con el conductor de un Chevrolet Corsa de 63 años y su hermana que le ofrecieron perseguir al ladrón. “No los conocía”, aseveró Gerardo.
“El tipo (el ladrón) manejaba inmutable, como si nada pasara”, dijo el dueño del utilitario robado y contó además que en la esquina de Urquiza y Oroño lo alcanzaron y pudieron retenerlo por la acción de una mujer con una beba en el auto que le cruzó el auto para colaborar en la detención civil.
Después de la persecución, la hermana de Fernando contó que él es un paciente cardíaco que empezó a sentirse mal en medio de la adrenalina y tuvo que ser asistido por una ambulancia porque se descompensó al llegar a la esquina donde atraparon al delincuente.
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