“Se trata de un colega médico con quien pudimos llegar a tiempo a suministrarle la infusión de plasma, tal vez en el momento más oportuno que existe hoy para poder infundir el plasma. Sabemos que los pacientes que están internados, contando con los marcadores biológicos, las imágenes radiológicas, y que comienzan a desaturar el oxígeno, y, además, cuentan con alguna enfermedad preexistente a la infección de Covid; transcurren por el momento en que, en el mundo, la ciencia médica reconoce como el ideal para recurrir a la aplicación de plasma. Se hizo la infusión y hasta el momento los parámetros que venimos evaluando evidencian buena recuperación y un alentador pronóstico.
El caso anterior, doctor Perichón ¿era en un paciente en estado reservado?
Sí. Se trata de un paciente que al momento de iniciar el tratamiento estaba en estado crítico; no obstante, ese primer paciente tratado está en estado estable. No agravó su estado; lo cual se revela como alentador ya que estabilizó su parte hemodinámica que era la mayor preocupación del equipo de salud que lo atiende.
Si bien todos sabemos que estamos frente a un tratamiento de carácter experimental, ¿cómo vislumbra, doctor Perichón, el tratamiento de aquí hacia el futuro hasta que aparezca la vacuna?
Hacemos algo que está aceptado internacionalmente; que, si bien no tiene evidencia científica empíricamente, se recurre a este tratamiento que ya se ha mostrado eficaz en otras enfermedades. Nosotros estamos recurriendo a un tratamiento que es biológico, respetamos la fisiopatogenia de la enfermedad. Sabemos que los pacientes demoran un tiempo en desarrollar por sí mismo los anticuerpos para enfrentar al virus y que lo van a proteger; nosotros le estamos prestando anticuerpos de otro paciente que los desarrolló para aplicárselos en ese momento tan oportuno de su evolución, para que pueda defenderse más fácilmente, para que luego, se le sumen los anticuerpos propios que el mismo paciente va a ir generando.
De todos modos, doctor Perichón, ¿con este tratamiento son respetuosos de uno de principios fundamentales de la asistencia médica: “primero no dañar”?
En estos dos pacientes que estamos tratando no hemos tenido ningún efecto indeseable de la aplicación de suero de paciente recuperado de la infección por Covid19. En el mundo se han reportado muy pocos efectos colaterales que, de todos modos, son banales, como rush cutáneo y picazón como si fueran reacciones alérgicas a ciertas proteínas que van junto a los anticuerpos en el plasma y se produjeron en el 1% de la población tratada con esta terapéutica.
Sabemos que los anticuerpos bloquean la acción del virus y lo que se está viendo con este tratamiento que, a la vez, los pacientes se benefician con una acción antiinflamatoria propia, tal vez, de alguna otra molécula que no conocemos y que acompañan a los anticuerpos.
*Doctor Mario Perichón, director provincial del CUDAIO