A dos semanas del crimen de Leoncio Bermúdez, el subinspector de la policía que fue asesinado de un disparo en la cabeza por parte de sujetos que escapaban de la guardia del hospital Provincial, su viuda reclamó justicia y manifestó que, aunque los encargados de la investigación se comunican con ella, todavía no hay novedades significativas en la causa.
Romina, la mujer del policía asesinado, dio su testimonio en el programa Telenoche Rosario (El Tres) y expresó que no solo la fiscal del caso se comunica periódicamente con ella sino también los funcionarios del gobierno provincial, que le ofrecieron contención y asistencia psicológica para ella y sus hijas. Sobre todo para Valentina, la chica de 12 años que estaba con su papá el día del ataque mortal en el hospital en Pasco al 400.
“Estamos como podemos y tomamos fuerza de donde sale, porque él se merece que se haga justicia”, reconoció Romina y agregó que de la investigación todavía no tienen “nada concreto, aunque hay movimientos en la causa”.
“Tengo confianza que encuentren a los responsables, que no sea un caso más, un policía asesinado más”, dijo la mujer. Sobre la hija de 12 años que estaba en el destacamento el día del crimen de su papá, Romina contó que la niña “no cae todavía en lo que pasó y vive el día a día”. “Tratamos de salir adelante como él nos enseñó siempre”, expresó. Dijo que la chica había ido al hospital ese martes porque se complicó trasladarla hasta la casa de su abuela, la madre del policía. “Fue la única vez que fue ahí, en los 12 años que tiene, pero si su padre hubiese sabido del riesgo al que se exponía, no la llevaba”, comentó. “Estoy enojada con todo el mundo, no puedo entender la organización. No puedo entender que a un preso lo atiendan en un lugar donde se mezclan con otras personas sin refuerzos policiales”, se quejó Romina. Además, lamentó: “Me sacaron la mitad de mi vida y al padre de mis hijas; como padre era perfecto”. “Con el tiempo me voy a llenar de fuerza para que se haga justicia, todo este dolor que tengo se va a transformar en fuerza para reclamar justicia”, concluyó Romina. El policía Leoncio Bermúdez fue asesinado de un tiro en la cabeza por sicarios el martes 14 de noviembre a la noche en el marco de un gravísimo hecho de violencia armada en el ingreso a la guardia del hospital Provincial de Rosario, en pleno barrio Martin. Lo atacaron cuando salió del destacamento para fijarse qué ocurría en el interior del centro de salud, donde al menos cuatro personas entraron en búsqueda de Gabriel Guillermo Lencina, un preso condenado por homicidios que estaba internado. Bermúdez era rosarino, tenía 42 años y estaba en pareja con Romina, con la que tienen dos hijas pequeñas. Se desempeñaba en la actualidad como subinspector de la Unidad Regional II de Policía, pero trabajaba en la fuerza desde 2009. Más informaciónEl caso
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