En 2019 Dolores Reyes parió Cometierra, su primera novela. Este año, llegó la segunda, Miseria. Las siente como dos hijos más, tiene siete. “Mis bebés”, los llama. La maternidad es uno de los universales que atraviesa su obra hecha de conurbano bonaerense. Las violencias, el duelo, la identidad y la magia son otros.
Docente, escritora y feminista, Cometierra nació de la no ficción de Selva Almada, Chicas muertas. Terminó de leerlo y comenzó a gestar a esa bruja adolescente, en duelo por el femicidio de su madre –a manos de supadre– capaz de conectar con dolores ajenos al tragar tierra. Miseria llegó para completar esa magia con otra historia cruda.
Con el Club de Lectura habló de los temas que le interesan y, por supuesto, de sus libros amados.
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