Diego Beretta se desempeña en la Facultad de Ciencia Política y Relaciones Internacionales de la Universidad Nacional de Rosario. Desde su lugar en el seminario electivo “Juventudes y Políticas de Juventud” desarrolla, como parte de un equipo integrado por Natalia Galano y Fernando Laredo, una mirada que busca complejizar el tema, saliendo de los enfoques tradicionales.
¿Cuánto hace que trabajás en el tema juventudes?
Nosotros, junto con algunos colegas de Comunicación Social y de Ciencia Política, presentamos hace 10 años una oferta de seminarios electivos en la Facultad de Ca. Política y RR.II. de la cual soy docente. Desde el 2008 empezamos a intentar promover el estudio y la investigación sobre el tema de las juventudes.
Desde ese año arrancamos con el seminario electivo que se llama “Juventudes y Políticas de Juventud”, destinado a las carreras de Trabajo Social, Ciencia Política y Comunicación Social.
¿Qué detectaron en el 2008 que los hizo pensar en abordar este tema?
Tengo antecedentes de gestionar el Área de Juventud de la Municipalidad de Rosario. Desde principios del año 2000, empiezan a aparecer en el ámbito académico, estudios e investigaciones sobre el tema de jóvenes. Desde ese momento también se empieza a pensar el tema de la participación política y ya no tanto a los jóvenes como problema si no como sujeto de derecho. De esta manera se empiezan a fortalecer algunas investigaciones.
¿Cuál es la situación en el ámbito académico?
El campo de estudio, como campo de investigación de las juventudes, no existía. Eran campos, en términos de Bourdieu, de la Sociología, de la Ciencia Política, de la Educación o la Comunicación en los cuales algunos trabajaban con jóvenes. A partir de la década del 2000, y más específicamente casi a finales del 2007, se empieza a conformar lo que es la Red de Investigadores de Juventudes de la Argentina. De alguna manera ahí se empieza a ir formando un campo específico sobre este tema. A fines del 2016 se realizó la V Reunión Nacional de Investigadores en Juventudes Argentina (ReNIJA) la cual tuvo lugar en Rosario. Producto de esa red es el libro “Estudio sobre Juventudes en Argentina V”. La sexta reunión se hará este año en Córdoba.
Contanos sobre el seminario “Juventudes y Políticas de Juventud”.
En su momento ese seminario era una preocupación en la ciudad y nos parecía muy acorde empezar a trabajar estos temas en el ámbito de la facultad. Tuvimos mucho acompañamiento de los estudiantes que empezaron a anotarse y muchos de ellos después terminaron sus tesinas de grado en base al seminario. Encontraron un sujeto de estudio que en este caso son los jóvenes.
Por todo lo expuesto, para abordar el tema ¿sería más útil hablar de “juventudes” en vez de “juventud”?
Siempre tenemos esta concepción de juventudes o sea de una diversidad. Tratamos de no homogeneizar a los jóvenes, si no reconocer que son diferentes, diversos y que también son desiguales. Muchas veces se plantea la diversidad como un atributo positivo pero también tenemos algunos atributos, ya sea en términos económicos, sociales y políticos, en que hay desigualdad dentro de las juventudes como sector.
También reconocemos a los jóvenes como sujetos plenos de derecho. Esto implica que estamos un poco en desacuerdo con esta idea de los jóvenes como una etapa de preparación para la vida adulta. Los vemos como un momento pleno de la vida. Las primeras definiciones de los jóvenes eran los “jóvenes ni-ni”: ni niños ni adultos. Quedaban en una nebulosa.
¿Trabajan con jóvenes en un determinado rango de edades?
Desde la concepción más socio-política de los jóvenes la cuestión etárea no es tan significativa para nosotros. Creemos que a los derechos no los garantiza la mayoría de edad si no que jóvenes de 13 o 14 años tienen derecho a participar políticamente, a decidir sobre las cuestiones de sus barrios, a decidir sobre el espacio urbano. Trabajamos mucho la relación ciudad-juventud.
¿Cómo abordan el trabajo con los jóvenes?
Hay un par de investigaciones que hemos presentado en las Jornadas de Ciencia y Tecnología SeCyT-UNR de un proyecto que tiene varios años y se llamaba “Yo amo yo odio”. Trabajamos con distintos jóvenes de la ciudad y veíamos qué amaban y qué odiaban de la ciudad. Esto era como una estrategia metodológica, ya que como nosotros no los vemos como objeto de intervención no podíamos ir y decirles que les íbamos a hacer una entrevista. Nos acercábamos desde cuestiones lúdicas, utilizando el espacio de las plazas de la ciudad y con la participación de los estudiantes del seminario en este proceso de investigación.
¿Qué problemáticas trabajan?
Todos los años vamos trabajando diferentes problemáticas que atraviesan a los jóvenes o que consideramos que ellos pueden resolver. En los últimos años hemos trabajado algunas cuestiones de violencia, con jóvenes desde 12-13 años hasta de 20 y pico. Lo trabajamos por situaciones o problematizando temas de la ciudad. Básicamente en estos 10 años del seminario, por lo general trabajamos temas de participación política en sentido amplio, porque para nosotros la participación política no lo es únicamente en los partidos políticos si no que creemos en la participación de los jóvenes en organizaciones de la sociedad civil, desde la gestión cultural, desde los centros de estudiantes de una escuela, etc. Este es un tema clásico de investigación. El otro es políticas públicas para jóvenes, a nivel local, provincial o nacional.
¿Cómo se investiga el tema Juventudes en otros países de Latinoamérica?
Hay una movida de investigaciones en América Latina, con dos actores centrales que han favorecido este proceso: el Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO) y la Red de Universidades CLACSO. De hecho, CLACSO tiene un grupo de trabajo, del cual participamos, que es específicamente sobre Juventud. CLACSO también viene haciendo, junto con la Universidad de Manizales, una red de posgrados sobre Juventudes, todos los años. México fue uno de los pioneros sobre investigaciones en este tema, en Chile hay algunos otros grupos, Colombia también tiene una presencia fuerte al igual que Uruguay. Hay dos compañeros de ese país que publicarán nuestro libro “Políticas de Juventudes y Participación Política” que sale en junio. En general se está afianzando como campo no solo en la Argentina, si no que es un movimiento de América Latina.
¿Se estudia el tema en el hemisferio norte?
No estamos tan influenciados con investigaciones de EE.UU. y de Canadá. Sí con algunos grupos e investigadores de Europa. Por ejemplo, España es un país pionero en el mundo, siendo uno de los primeros en tener un organismo nacional dedicado a las políticas públicas de Juventud. Junto con Portugal, son países de los cuales hemos tomado de muchos investigadores contemporáneos con los cuales estamos en contacto (Carles Feixa de la Universidad de Lleida, Machado Pais de la Universidad de Lisboa). Por ejemplo, Carles Feixa publica en el libro que publicamos con la UNR Editora y con él compartimos un simposio que se hizo en 2017 en Buenos Aires sobre Políticas de Juventudes.
De EE.UU. y Canadá o no nos llegan o no hay investigaciones desde este campo. Tal vez las haya desde la Antropología, o de otras áreas que trabajen algunas cuestiones con jóvenes.
Estuviste en la Feria del Libro de Buenos Aires presentando un libro.
Estuvimos presentando el libro que forma parte de la colección “Las Juventudes argentinas hoy” del Grupo Editor Universitario, dirigida por Pablo Vommaro, un investigador de CLACSO y de la Universidad de Buenos Aires. Esta es una colección que se está fortaleciendo como un campo porque es la única existente de manera integral y que trata las diferentes dimensiones que atraviesan a los jóvenes. Tenés libros de educación, de participación política, de cuestiones culturales como la cumbia, las fiestas electrónicas, etc. Hay 23 títulos y el nuestro, que hicimos con Fernando Laredo y Natalia Galano, se llama “Cartografías de Políticas Públicas de Juventudes”.
¿De qué trata este libro?
Es una reconstrucción histórica de la cuestión juvenil y de cómo esa cuestión se materializó a través de políticas públicas a nivel municipal con la creación de áreas específicas de Juventud, algo que en nuestra ciudad se concretó a partir del año 1989. A través de la metáfora de los mapas, tratamos de ver cómo esas políticas fueron cambiando según el contexto y las nociones que había sobre juventudes, cómo se conceptualizaba a los jóvenes, cuáles eran las problemáticas. Tratamos de dar cuenta de cómo desde el ´89 hasta la actualidad estos mapas o cartografías de políticas públicas en juventudes se fueron modificando, mejorando, retrocediendo, yuxtaponiéndose, etc.
El 4 de junio presentamos los 23 títulos de la colección, incluido el nuestro, en la Feria Internacional del Libro de Rosario.
En estos 10 años, ¿qué problemáticas de juventudes en términos de políticas considerás que han tenido un cambio destacable?
Hay un tema que estamos investigando y que es la implementación conjunta entre Municipalidad de Rosario y provincia de Santa Fe del programa “Nueva oportunidad”. Este programa nace por la problemática de los altos índices de violencia en Rosario a partir del 2012-2013, específicamente con los jóvenes y jóvenes de sectores populares. Muchas veces parece que solo es un programa de capacitación para el empleo y lejos está de eso. Hay todo un entramado institucional que hace que los Estados municipal y provincial logren una contención para esos jóvenes en situación de violencia y que construyan participativamente junto a los jóvenes un proyecto de vida.
Esto de jóvenes trabajando con jóvenes, ¿implica un corrimiento de la mirada del adulto?
No hay una mirada adultocéntrica de cómo deberían ir a la escuela, formarse, tener un hijo, tener trabajo, una familia, etc. Esos proyectos de vida se construyen en cada contexto particular y entre los jóvenes. Además, se suma que en los últimos años se está trabajando y planificando desde el territorio junto a las organizaciones existentes. Entonces hay una vinculación muy fuerte del Estado con centros comunitarios, sindicatos, bibliotecas populares, escuelas, etc. Ahora estamos empezando a hacer una especie de evaluación y en los últimos años se está convirtiendo en un programa ciertamente paradigmático porque ha logrado recuperar aprendizajes de otros tipos de políticas de años anteriores y ha estado muy a la altura del contexto actual, logrando adaptarse a una situación a la cual no estábamos acostumbrados.
¿Qué es el Presupuesto Participativo Joven?
Es una experiencia de participación de los propios jóvenes de toda la ciudad, algo que viene mejorando muchísimo año a año desde el 2007-2008. Es un aprendizaje que forma parte de la construcción de ciudadanía en los jóvenes. Los jóvenes aprenden a participar participando. Los propios jóvenes definen en qué invertir ciertos montos de dinero del municipio, en actividades y políticas concretas. Ese programa ha sido replicado en otras ciudades a partir de la experiencia de la ciudad de Rosario.
¿Algo que quieras destacar?
Creo que en los últimos años se está reconociendo a los jóvenes como un sector pleno de la sociedad, donde se está tratando de poner en crisis esta mirada adultocéntrica, aunque todavía no se ha logrado. Todavía miramos las políticas para los jóvenes desde una mirada adulta y esto, en realidad, es una relación de poder. Esto lo vemos mucho en los partidos políticos, en las campañas electorales, con el mensaje de que se trabaja para los jóvenes, quienes tienen que prepararse porque van a ser nuestro futuro.
Nosotros siempre decimos que no son el futuro de la sociedad, sino que son el presente. Por eso hay que darles espacios tanto formales como informales en el presente.
En términos académicos tenemos algunos trabajos sobre cómo han crecido los trabajos finales de tesinas con temáticas específicas en el tema juventud en las carreras de Ciencias Sociales. Creemos que hemos aportado un granito de arena desde nuestro seminario para que se generen estas cuestiones.
Tapa del libro "Políticas de Juventudes y Participación Política".
A título personal
Diego Beretta.
Docente de Política Social I – Lic. en Trabajo Social – Facultad de Ca. Política y RR.II.
Docente del Seminario electivo Juventudes y Políticas de Juventud – Facultad de Ca. Política y RR.II.
Coordinador del Grupo de Estudios sobre Juventudes y Políticas de Juventud – Instituto de Investigaciones - Facultad de Ca. Política y RR.II.
Claudio Pairoba es miembro de la Escuela de Comunicación Estratégica de Rosario y la Red Argentina de Periodismo Científico. Acreditado con la American Association for the Advancement of Science (Science) y la revista Nature.