El amor tiene sus maneras, tanto como la convivencia y qué hablar del aislamiento social preventivo y obligatorio dispuesto para contener la pandemia de coronavirus.

Juana Repetto pasa sus días de cuarentena junto a su novio, el instructor de snowboard Sebastián Graviotto. A la pareja se suma Toribio, el hijo de la actriz.

Tal como nos enteramos en redes sociales, la familia pasa sus días entre juegos con el pequeño, recetas de cocina que Juana comparte online y los momentos íntimos.

Hoy, el día que en algún momento creímos que terminaría... les dejo postales REALES de lo que fue esta primera etapa de #cuarentena ��. Verán cosas como por ej hijo rompiendo en llanto (llora, se enoja y se frustra MUCHO más que lo habitual), nuestro compromiso en la terraza con chori de fondo ��, juego, actividades infinitas que jamás duran más de diez minutos (te lleva más tiempo ordenar el QUILOMBO qué haces que lo que entretuviste al pibe), bailes, mimos extremos, PEGOTE X MIL (qué difícil va a ser que nuestros niños puedan volver a acostumbrarse a no tenernos 24/7 #miedo ). Pero en fin, intentando ver el vaso medio lleno (aparte de tener llenas las pelotas ��) siento que es una etapa de mucho aprendizaje, crecimiento, reencontrarse con uno mismo y con la familia desde otro lugar. A mi me está costando, soy muy social, curto mucho con amigos y demás... a mi hijo le está costando HORRORES no tener sus actividades diarias y el gasto de energía que le generan, mi novio extraña a su niña y se fuma al mío más intenso que nunca �� pero acá estamos FIRMES, EN CASA a pesar de cualquier cosa. #yomequedoencasa te pido por favor que por el bien de TODOS pero por sobre todo el de nuestros viejos, abuelos, y seres queridos con alguna dificultad en su salud, vos también lo hagas ����

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Entre las actividades para pasar el tiempo, la pareja se animó a un desafío para ver si estaba enamorada.  Para ello, debían bajar los dedos de sus manos ante las preguntas de un audio y, según el desafío, si les quedaban dos dedos sin bajar es que se aman.

Pero el resultado dejó algunas dudas: de las diez preguntas del challenge, Juana y Sebastián coincidieron solo en seis y les quedaron cuatro dedos sin bajar.