La Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came) informó que la producción de la industria pyme creció 1,5% en febrero, frente a igual mes del año pasado. De esta forma, aumentó por octavo mes consecutivo, aunque más lentamente y con mayor inestabilidad, con un incremento acumulado de 2,5% en los primeros dos meses del año.
“Los costos fijos altos y la falta de ventas son dos problemas serios que enfrenta el industrial, además del encarecimiento del crédito y los atrasos en los pagos, que golpean la rentabilidad de la pyme”, dijo Fabián Tarrío, presidente de Came.
De acuerdo con el trabajo, volvió a caer la proporción de empresas que progresan (sólo 42%), y el uso de la capacidad instalada bajó a 66%.
"Hay que tener en cuenta que se compara contra un mes de mucha caída, como fue febrero 2017 cuando la producción se retrajo 5% anual", aclararon.
De acuerdo con la Encuesta Mensual Industrial realizada por Came entre 250 industrias Pymes, frente a enero se registró un descenso de 6,8% (en la medición con estacionalidad), por la desaceleración de los pedidos y los menores días hábiles del segundo mes del año.
El progreso interanual alcanzó este mes al 42% de las industrias, cuando en enero aumentó el 50% y en diciembre había subido el 59,3%.
La merma del consumo interno en sectores como calzados, maderas, muebles, o papel y cartón por las menores ventas minoristas y los mayores ingresos de mercadería importada, se sintieron en las empresas en febrero.
A su vez, la proporción de firmas en baja subió a 32%, cinco puntos por encima de enero y casi 10 arriba de diciembre.
De los 11 sectores relevados, siete crecieron (Productos químicos, Material de Transporte, Productos de caucho y plástico, Productos de metal, maquinaria y equipo, Productos eléctrico-mecánicos e informática, Productos textiles y prendas de vestir y Alimentos y bebidas) y cuatro descendieron (Calzado y marroquinería, Maderas y Muebles, Papel, cartón, edición e impresión y Minerales no metálicos).
En diciembre y enero muchas industrias estuvieron recomponiendo stocks, proceso que se vio interrumpido en febrero por la demanda más lenta; así, el uso de la capacidad instalada se ubicó en 66%.
En la encuesta realizada en los primeros 20 días de marzo, se observó una nueva disminución en la proporción de industrias con planes de inversión para el año: del 41% de empresas que había contestado positivamente en febrero, se pasó a 35%.
A su vez, 19% lo está evaluando en función de cómo evoluciona la demanda, las condiciones y oportunidades de financiamiento.
Para 75% de las empresas las condiciones para invertir son entre regulares y malas, concluyó el informe.