Del alerta amarillo por calor que el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) le había otorgado a Rosario el viernes se pasó este sábado a las advertencias por posibles tormentas fuertes para la región del sur santafesino. A la tarde, cuando la lluvia comenzó a caer, cesó un aviso “a muy corto plazo” sobre la llegada de fenómenos intensos pero a las 18 se renovó otro genérico.
Según ese último parte, el centro y sur de Santa Fe están dentro de la zona en la que podrían darse fenómenos intensos, con abundante caída de agua, probable granizo, ráfagas y actividad eléctrica.
De hecho, en localidades de Santa Fe y de Córdoba el temporal se hizo sentir. En Carlos Pellegrini, por ejemplo, se cayeron cuatro columnas de alta tensión de la EPE.
Por otro lado, el agua que empezó a caer en la ciudad cerca de las 15 frenó el termómetro -la temperatura máxima esperada era de 34 grados- y lo ubicó en torno a los 26 grados.
Más allá de eso, el pronóstico regular del SMN mantiene para este domingo la probabilidad de “lluvias y tormentas”, una mínima de 21 grados y una máxima de 38.
Doble alerta
En el arranque de la jornada el panorama era muy distinto al presagiado. El cielo estaba parcialmente nublado, la temperatura era de 26 grados y la humedad del 77 por ciento.
El SMN publicó al mediodía (con vigencia hasta las 18) un aviso por la llegada de tormentas fuertes, lluvias intensas y posible caída de granizo para todo el sur santafesino, incluyendo a Rosario.
El alerta señaló que algunos de los fenómenos podían ser localmente fuertes, con abundante caída de agua en cortos períodos de tiempo, probable caída de granizo, ráfagas y actividad eléctrica.
Después le sumó otra advertencia de “muy corto plazo”. A las 15.57, el parte se renovó y desplazó la zona alcanzada hacia el norte y el oeste, por lo que Rosario dejó de esta en esa situación. Ver mapa:
A las 18 se renovó el alerta por tormentas fuertes para una amplia zona de cobertura, en el centro del país.
