Un panadero del Municipio de Tolhuin, en Tierra del Fuego, se propuso unir caminando todo el país para concientizar sobre la necesidad de mantener las rutas limpias de basura. Ya lleva recorridos 834 kilómetros desde su partida de La Quiaca, en Jujuy, el último 7 de agosto, hasta su reciente arribo a localidad de Frías, en Santiago del Estero.
Emilio Sáez, de 63 años, bautizó su campaña como "Basura Cero", y su proyecto nacional surgió después de haberlo realizado con éxito en territorio fueguino, donde unió a voluntarios y obtuvo apoyo de empresas e instituciones públicas para juntar en bolsas de plástico todos los desperdicios que encontró en ambos márgenes de la Ruta Nacional 3, entre las ciudades de Ushuaia y Río Grande.
"Me pareció que era el momento de la vida para poder encarar esta idea que reúne mi afición por caminar y por recorrer nuestro hermoso país, con la vocación de crear conciencia sobre la limpieza en las rutas y otras causas que también aprovechamos para difundir", contó Sáez mientras recorre el norte enarbolando una bandera argentina.
El comerciante de Tolhuin, dueño de "La Unión", la panadería más prospera del pueblo, vive en la casa rodante que preparó para la travesía o donde circunstancialmente lo alojan vecinos de cada lugar.
Ex combatientes de la guerra de Malvinas que se unieron a la iniciativa y van rotando en distintos tramos del viaje, lo acompañan en la caminata y en el traslado del vehículo para que pueda cumplir con tramos de entre 20 y 30 kilómetros diarios.
"Como fueguinos, la causa Malvinas nos acompaña a todos lados, igual que el legado del doctor René Favaloro que reivindicamos cada vez que podemos y al que homenajeamos con un rincón temático en nuestra panadería. También postulamos disfrutar de esta etapa de la vida, y por eso tenemos un sitio de Facebook que se llama «Hay vida después de los 60» donde puede seguirse la travesía", detalló Sáez.
Desde su partida de Jujuy, el panadero se detiene en escuelas donde le permiten dar charlas y también reparte sus calcomanías de "Basura Cero" a quien se las acepte, además de filmar videos con su celular donde va documentando los sitios más afectados por la falta de higiene.
"Las charlas son breves porque no queremos interrumpir las clases y para que los chicos no pierdan la atención. Hablamos de la basura, de la necesidad de cambiar conductas. En Tucumán, por ejemplo, una de las provincias más lindas de las cuatro que ya atravesamos, encontramos también la mayor cantidad de suciedad", expresó.
La parte más difícil del camino fue la inicial, donde se vieron afectados por los casi 4.000 mil metros de altura. "Falta el oxígeno, cuesta dormir, la boca se reseca. Cada paso cuesta", recordó Sáez.
El dueño de la panadería "La Unión" también fue noticia el año pasado, cuando el diario La Nación lo calificó como "el mejor jefe de la Argentina" por haber construido una casa en Puerto Madryn, con cuatro habitaciones, jardín y pileta climatizada, para compartirla con los 30 empleados de su comercio, que se turnan para visitarla junto a sus familias y amigos entre 10 y 12 días al año.
El comerciante les paga todos los gastos para el viaje desde Tolhuin a Madryn (con excepción de la comida) y las jornadas de descanso que se toman no cuentan como días de sus vacaciones anuales.
"En una panadería se trabaja todo el tiempo, muy intensamente, con el otro. Hay que llevarse bien. A mí me gusta que la gente esté bien y venga a trabajar contenta", había justificado cuando le preguntaron por la singular modalidad.
Ahora, tras su llegada a Santiago del Estero, Sáez decidió hacer un alto en el camino y regresó unos días a Salta para participar de la peregrinación a San Antonio de los Cobres donde los lugareños agradecen a la Virgen del Milagro.
"Hay mucho que agradecerle a la vida. Por eso estamos acompañando a los peregrinos y suspendimos la caminata unos días. Vamos a pedirle por algunos amigos y agradecer este viaje impresionante", relató.
Después, el periplo de 4.255 kilómetros continuará con rumbo sur: se sumará gente que vendrá a buscarlo desde Córdoba y desde allí, con distintos acompañantes, continuará el derrotero que tiene como objetivo poder llegar a Tierra del Fuego el 2 de abril del próximo año cuando se cumpla un nuevo aniversario del desembarco de las tropas argentinas en las islas Malvinas.
"Para mí es algo maravilloso. Siento que puedo hacerlo y que no voy a fallar. Y sigo confirmando que hay vida después de los 60", afirmó el panadero.