El estreñimiento es la dificultad o imposibilidad de evacuar de forma natural. Durante los primeros meses de vida del bebé los músculos del intestino y del ano, no son muy eficientes o bien, no han madurado lo suficiente. Esto puede hacer que el bebé tenga estreñimiento.

La consistencia de las heces es clave para saber si el bebé tiene estreñimiento o no. Si esta es suave y el bebé no tiene dificultad para expulsarla, es completamente normal. Sin embargo, cuando las heces son duras y de color oscuro, el bebé puede estar estreñido, tal como publica el portal maternidadfacil.

Aunque no es frecuente que un bebé alimentado solo de líquido pueda tener estreñimiento, puede suceder.

Los bebés alimentados con leche materna no suelen tener estreñimiento. Esta leche es más fácil de digerir y tiene una hormona (motilina) que aumenta el movimiento de los intestinos del bebé. Puede interesarle leer el artículo sobre “Los beneficios de la lactancia materna”.

Los bebés alimentados con leche de fórmula son más propensos a tener problemas de estreñimiento. Esta leche es más difícil de digerir y pueden tener menos evacuaciones y más gruesas que los bebés amamantados.

Si el bebé tiene intolerancia a la proteína de la leche, esto podría causarle estreñimiento.

A partir de los 6 meses los bebés comienzan a comer alimentos sólidos. El tipo de alimentos que ingiera el bebé determinará en gran medida las heces que pueda tener.

La deshidratación también puede causar estreñimiento, sobre todo en climas cálidos.

Aunque es poco común, el estreñimiento puede ser causado por una condición médica como el hipotiroidismo, botulismo, trastornos metabólicos y alergias alimenticias.

Evacuación del recién nacido

El número de evacuaciones de un bebé varía de uno a otro. Para un bebé puede ser normal evacuar varias veces al día y para otro una vez a la semana.

Los bebés que se alimentan con leche materna suelen tener movimientos intestinales frecuentes. Las heces son de color amarillo y suaves. Pero sin embargo, también pueden pasar varios días sin evacuar.

El uso de laxantes en los bebés recién nacido solo se debe usar en casos donde el estreñimiento se da durante un período largo y el bebé tiene dificultad para expulsar las heces. Es recomendable que consulte con el médico antes de usar laxantes.

Evacuación en bebés a partir de los 4 meses de edad

Una vez el bebé comienza a ingerir alimentos sólidos, la frecuencia de las deposiciones, la consistencia y el aspecto de las heces dependerá de los alimentos que consuma. La frecuencia cambiará y puede que el bebé evacue varias veces al día o bien, cada dos o tres días.

En esta etapa los bebés son más propensos a tener estreñimiento. Esto se debe a  que los intestinos tienen que acostumbrarse a los nuevos alimentos y puede ser necesario aumentar la ingesta de líquidos para facilitar la digestión de alimentos fibrosos como las zanahorias.

¿Cómo tratar el estreñimiento en bebés?

- Masajes en la barriga del bebé. Masajear la barriga del bebé con movimientos hacia fuera en sentido horario. Puede utilizar un poco de aceite o crema para que los dedos se deslicen mejor por la piel. Si nota que el bebé esta incómodo e inquieto cuando se le realiza el masaje, deje de hacerlo.

- Mover las piernas del bebé con movimientos circulares (como si estuviese pedaleando). Esto hará que los músculos del estómago se muevan y se presione suavemente los intestinos, lo que aumentará la actividad de estos.

- Un baño caliente puede hacer que el bebé se relaje y que las heces pasen con más facilidad. También puede masajear el estómago mientras lo baña.

- Puede aplicar un poco de crema o vaselina alrededor del ano del bebé.

- No utilice el termómetro u otro objeto para estimular el movimiento intestinal.

- Compruebe si está preparando la leche de fórmula correctamente. Una mezcla demasiado espesa puede causar estreñimiento y otros problemas médicos. Hay diferentes marcas de leche de fórmula en el mercado, es preferible usar siempre la misma ya que a veces pueden precisarse cantidades diferentes y esto puede llevar a confusiones.

- Aumentar la ingesta de líquidos, preferiblemente agua.