El presunto autor del crimen de Kevin Aguirre, sucedido el 9 de febrero, seguirá en prisión. Así lo resolvió la jueza Patricia Bilotta este miércoles, en la audiencia donde el joven de 22 años fue imputado. El fiscal del caso supone que la causa podría tener vínculos con el narcotráfico.
Al acusado por el asesinato de Kevin, que tenía 17 años, se le imputó homicidio agravado por uso de arma de fuego y portación ilegal de arma de fuego en calidad de autor. Además, se le dictó prisión preventiva sin plazo tal como lo había solicitado la Fiscalía.
Ante la prensa, el fiscal Pablo Pinto manifestó que investigan a otra persona que estaba con el presunto autor del asesinato al momento el hecho. De todas maneras, afirmó que el único que portaba un arma era el joven de 22 años que ya quedó detenido desde el pasado lunes.
El acusado contaba con una condena previa, según información del fiscal. "Estaba cumpliendo el beneficio de la libertad condicional. Eso la jueza lo tuvo en cuenta a la hora de dictar la prisión preventiva por ley", comentó.
Pinto explicó que el imputado dio una versión "distinta" a la que tiene la Fiscalía y reconoció haber disparado ocho veces contra Kevin. "Dijo que él y su familia estaban amenazados y que reaccionó. La evidencia me indica lo contrario", señaló.
Por último, el fiscal de Homicidios advirtió que la causa "podría tener un vínculo con el narcotráfico" aunque todo sigue siendo materia de investigación.