El secretario gremial del Sindicato de los Empleados Gastronómicos de Rosario, Sergio Ricupero, confirmó que avanza la idea de implementar un "laudo" de pago obligatorio en la cuenta del cliente en bares y restaurantes y dijo que no sería un reemplazo de la propina. 

El vocero local de la Unión de Trabajadores del Turismo, Hoteleros y Gastronómicos de la República Argentina (UTHGRA), que lidera Luis Barrionuevo, señaló que "está trabada la negociación paritaria" porque los empresarios ofrecen de aumento menos que la inflación, y los trabajadores ya perdieron el año pasado frente a la inflación. 

"Tuvimos solo un 25% de suba para trabajadores de la actividad", dijo Ricupero en el programa A diario (Radio 2) y agregó: "El gremio ya está cansado de esto, es una cámara (empresaria) pijotera, los empresarios de los hoteles cinco estrellas se esconden detrás de los de dos estrellas".

En ese marco, el dirigente gremial reflotó el concepto de laudo que se implementó por primera vez en la década del 40. Ricupero dijo que es un ítem distinto al cobro de cubiertos (servicio de mesa) y a la propina.

"El laudo era un porcentaje que se cobraba sobre la facturación y que se divide entre todo el personal y va al sueldo de todos. En cambio la propina es solo para la persona que te atiende", diferenció el secretario gremial.

En ese caso, ante una cena o almuerzo de 800 pesos se debería añadir el extra del laudo (de un 15 ó 20 por ciento) y a eso la propina (que seguiría siendo opcional), por lo que la cifra final superaría los mil pesos.

Ricupero reconoció que no es el mejor momento económico para sobrecargar las cargas al cliente pero insistió en que los haberes de los gastronómicos ya vienen "atrasados como mínimo un 15% frente a la inflación del año pasado".

"Tenemos que solucionar el tema paritario", aclaró el dirigente de la Uthgra sobre el trasfondo de la discusión.

Ocho décadas de marcha y contramarcha 

“El Laudo Hotelero y Gastronómico” fue establecido en septiembre de 1945 en el gobierno de Juan Domingo Perón, que prohibió la propina individual y fijó un sistema de retribución colectiva”, según informó la página de Diputados de Buenos Aires.

El 18 de febrero de 1946, el decreto-ley 4148 convalidó el Laudo Arbitral que luego la Ley 12.921 “elevó de rango”. Sin embargo, en 1955, durante el gobierno de facto de Juan Carlos Onganía y Eduardo Lonardi, se suprimió por primera vez.

Unos años después, en 1973, con el tercer gobierno peronista, el “Laudo Gastronómico” fue repuesto. Pero, la última dictadura cívico-militar dictó el decreto-ley 22.310 que, en 1980, lo eliminó nuevamente.

La última que intentó reponerse fue en 2009 cuando los por entonces senadores Adolfo Rodríguez Saá y Liliana Negre de Alonso presentaron una iniciativa para fijar “una comisión no inferior al 10% de la facturación bruta del establecimiento”.