El sector panadero es uno de los que más ha sentido el peso de la crisis económica que atraviesa el país, con un combo que resulta fatal: el aumento sideral de las tarifas y el incremento imparable del precio de la harina. Desde la federación de Panaderos indicaron que en las grandes ciudades hay panaderías que bajan sus persianas todos los días y señalaron que lo que está ocurriendo con el precio de la harina, que sigue subiendo en esta época de cosecha del trigo, “nunca pasó en la historia de la indistria panadera”.
Gerardo Di Cosco, titular local de la federación de Panaderos, le contó al periodista Pedro Levy que “en dos provincias importantes, en Salta y Catamarca, cerraron dos panaderías muy importantes, dejando a 100 trabajadores en la calle”.
Agregó que “en La Plata también cerró una panadería tradicional, con más de 63 años en el rubro, que tuvo que bajar las persianas porque ya no pueden hacer frente al aumento de las tarifas”.
“Pasa en todas las grandes capitales; en Mendoza han cerrado 10 panaderías, en Córdoba 20, acá en Rosario tenemos contabilizadas unas 60 panaderías que han cerrado. Y en la medida que esto siga así, van a seguir cerrando”, describió Di Cosco con pesimismo.
El referente rosarino de panaderos aseguró que muchas de las panaderías que no cierran definitivamente “bajan las persianas y no hacen atención al público, empiezan a evadir impuestos, se enganchan de la luz, no pagan ingresos brutos; que es competencia ilegal para el panadero que está en regla”.
Di Cosco subrayó que “la tarifa de gas industrial aumentó el 100 por ciento directo desde septiembre a esta parte”.
Luego dio un dato revelador: “Como nunca en la historia de la industria panadera, en los meses de noviembre, diciembre, enero y parte de febrero la harina tiende a bajar porque hay cosecha de trigo, pero esta vez está aumentando; es increíble”.
Después detalló que “de las 19 millones de toneladas que se preven que hay de cosecha, ya hay 9 millones vendidas al exterior y lamentablemente vamos a tener que pagar la harina al mismo precio que se vende afuera”.
Di Cosco anticipó que llamaron “a una reunión urgente a nivel nacional porque de seguir así vamos a cerrar por decisión propia o por obligación porque así no se puede seguir”.
“Hemos intentado muchas reuniones con el gobierno nacional, pero nunca nos han atendido y ahora tampoco nos van a atender”, finalizó.