Sentían que tenían un mensaje para dar y hablaron. Los padres de Giuliana Maldovan, la chica que falleció por consumir drogas sintéticas en una fiesta electrónica en Arroyo Seco, pidieron a los jóvenes que tomen el caso de su hija como un "ejemplo" para cuidar sus vida. "Ella pensaba que a su edad era indestructible. Cometió un error, fue inconsciente, no era una drogadicta", afirmaron. Además, advirtieron que en el evento llevado a cabo en Punta Stage hubo "un desbande total con el afán de hacer más dinero".
En diálogo con De 12 a 14 (El Tres), Ana y Horacio Maldovan expresaron que pretenden que el fallecimiento de Giuliana "marque el camino a los chicos que se creen indestructibles". "Que no haya ni una Giuli ni un Lucas más", comentó el papá, haciendo referencia también al otro muchacho que murió en similares circunstancias.
"Mi hija cometió un error, fue inconsciente. Ella no era drogadicta. Me tocó verla en un ataúd. Siento impotencia, estoy anestesiada por el dolor. Si no damos esta nota, en una semana Giuli desaparece de los medios y nadie va a hacer nada", sostuvo la madre.
"Para ellos (Live Art Producciones, el organizador) es dinero; para mí es la vida de mi hija. No le creo al intendente de Arroyo Seco, él sabía (de la fiesta) y la zona estaba liberada. ¿Nadie controló las canillas del baño, quiénes vendían (droga) adentro?", subrayó la mamá de la joven y preguntó: "¿Cuántas personas más tienen que morir para que se hagan controles?".
"Ella se equivocó. También la ayudaron a que se equivoque. A los chicos les digo que disfruten la vida como es, que no necesitan otra cosa para disfrutarla. No se dejen llevar", añadió Horacio.
Los papás de Giuliana remarcaron que a su edad no "podían" controlar las decisiones que ella tomaba fuera de su casa, por más que, aseguraron, en familia se hablaba mucho de todos los temas. "Muchos padres nos contaron que tienen miedo de que sus hijos vayan a estas fiestas. Podrían haber sido más (muertes)", expresaron.
El padre de la joven fallecida apuntó que les llegaron comentarios que la droga se compraba en el lugar "como caramelos". "Que no haya impunidad. Esto fue un negocio. No importa la vida de la gente. Que no hubiera agua era el negocio de ellos (organizadores del evento)", concluyó.
“Que no haya ni una Giuli más” (audio De 12 a 14)
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