El comité de empresa de
Opel en Alemania ha convocado para el jueves huelgas en las fábricas alemanas, que se extenderán posteriormente por Europa el viernes y el lunes, en protesta por la decisión de General Motors de no venderla a Magna y Sberbank.
La portavoz del sindicato IG Metall Simone Ebel-Schmidt dijo que los 25.000 empleados de las cuatro fábricas de Opel en Alemania secundarán mañana la huelga.
Añadió que los trabajadores de otras factorías de Opel en Europa se unirán a la acción de protesta el viernes y el próximo lunes, si bien todavía desconocía cómo se producirán los paros exactamente en cada país.
El presidente del comité de empresa de Opel, Klaus Franz, dijo que "el próximo paso de General Motors será presionar a los gobiernos y los trabajadores en Europa para financiar un concepto que no es sólido".
Los representantes de los trabajadores no van a admitirlo y buscan un acto solidario con los gobiernos, dijo Franz.
El productor automovilístico alemán Opel consideró que la decisión de la matriz estadounidense de no venderla a Magna muestra que General Motors ve en Opel una parte de la empresa estratégica.
El consejo de administración de General Motors, reunido en Detroit (EE.UU.), decidió cancelar la venta de su filial europea Opel al productor de componentes austríaco canadiense Magna y su socio ruso Sberbank.
La matriz estadounidense había mostrado en muchas ocasiones sus reparos para vender Opel a Magna y Sberbank porque tiene reticencias en ofrecer su tecnología a los rusos.
IG Metall criticó que GM ha llevado a Opel a una difícil situación con errores de gestión durante años, por lo que es inimaginable que ahora vaya a presentar una solución sólida.
La portavoz del sindicato IG Metall Simone Ebel-Schmidt dijo que los 25.000 empleados de las cuatro fábricas de Opel en Alemania secundarán mañana la huelga.
Añadió que los trabajadores de otras factorías de Opel en Europa se unirán a la acción de protesta el viernes y el próximo lunes, si bien todavía desconocía cómo se producirán los paros exactamente en cada país.
El presidente del comité de empresa de Opel, Klaus Franz, dijo que "el próximo paso de General Motors será presionar a los gobiernos y los trabajadores en Europa para financiar un concepto que no es sólido".
Los representantes de los trabajadores no van a admitirlo y buscan un acto solidario con los gobiernos, dijo Franz.
El productor automovilístico alemán Opel consideró que la decisión de la matriz estadounidense de no venderla a Magna muestra que General Motors ve en Opel una parte de la empresa estratégica.
El consejo de administración de General Motors, reunido en Detroit (EE.UU.), decidió cancelar la venta de su filial europea Opel al productor de componentes austríaco canadiense Magna y su socio ruso Sberbank.
La matriz estadounidense había mostrado en muchas ocasiones sus reparos para vender Opel a Magna y Sberbank porque tiene reticencias en ofrecer su tecnología a los rusos.
IG Metall criticó que GM ha llevado a Opel a una difícil situación con errores de gestión durante años, por lo que es inimaginable que ahora vaya a presentar una solución sólida.