El gobernador Miguel Lifschitz volvió a la actividad luego de la operación en el tendón de Aquiles, que todavía lo obliga a caminar ayudado por muletas. Lo hizo con una conferencia de prensa en la ciudad de Santa Fe, donde repasó los temas más importantes de la agenda provincial. Entre éstos, el aumento en el servicio de agua que se anunció la semana pasada. El máximo mandatario santafesino dijo que “los informes demuestran la necesidad de esa suba” y agregó que “la empresa es deficitaria”.
El viernes pasado, el Ministerio de Infraestructura y Transporte de Santa Fe resolvió modificar el cuadro tarifario de Assa en dos tramos: 10% a partir de junio y otro 10% desde agosto. Ya había aumentado un 40% en el primer semestre.
“La verdad que sabía que estaba en marcha ese proceso; es parte de lo que había propuesto la empresa y se había discutido en la tres audiencias públicas que se realizaron”, respondió Lifschitz cuando le preguntaron por esta cuestión.
Luego detalló que “por el mes de marzo yo les pedí que no se establezca la totalidad del aumento porque había mucha incertidumbre sobre el rumbo de la economía”. Y añadió que “por eso se autoriazó el primer aumento y quedaban otras dos cuotas para esta fecha”.
El gobernador aseguró que “los informes que nos entrega la empresa demuestran la necesidad de implementar esos incrementos”. Y afirmó que Aguas Santafesinas “es una empresa que es deficitaria”.
Lifschitz argumentó que el actual esquema "genera una cierta inequidad con el resto de las poblaciones santafesinas, que están abastecidas por cooperativas o por los propios municipios, que generalmente pagan una tarifa bastante más alta que la de Aguas Santafesinas porque no tienen subsidios".
Y completó: "Nos hemos comprometido en el corto o mediano plazo el objetivo de lograr que el déficit operativo se pueda equiparar para ponernos a tono con el resto de los prestadores de la provincia".
