Grande fue la sorpresa de una rosarina que fue al corralón municipal a recuperar el auto que le habían remitido por falta de documentación y allí le informaron que el vehículo ya no existía porque lo habían compactado. Ahora la mujer presentó un reclamo a la Municipalidad por unos 70 mil pesos. En el programa A Diario (Radio 2) se escucharon las dos campanas de esta llamativa historia.
Según informó el sitio especializado Tiempo de Justicia, el año pasado inspectores municipales de Tránsito le remitieron el auto al corralón a una mujer porque no pudo entregar la documentación del vehículo.
Sucedió en abril de 2016, cuando un Volkswagen Pointer modelo 96, chapa patente AOW 825, fue derivado al corralón por la falta de papeles.
La mujer realizó a partir de entonces los trámites exigidos por la Dirección Municipal de Tránsito. Efectuó la transferencia, pagó multas y patentes, pidió turno para realizar la verificación técnica y contrató una póliza de seguros.
Finalizados los trámites requeridos, se presentó en julio de este año a retirar el vehículo. Pero le informaron que ya no existía más porque había sido compactado. Alega que nunca fue informada por escrito de la situación.
Ahora, con patrocinio de un abogado, presentó un reclamo administrativo por daños y perjuicios contra la Municipalidad de Rosario. Exige un resarcimiento económico de poco más de 70.000 pesos por el valor del vehículo compactado y los gastos realizados.
El reclamo
El abogado Ariel Gastaldi, que lleva adelante el reclamo, detalló en A Diario, el programa que conduce Alberto Lotuf en Radio 2, que a una mujer oriunda de Granadero Baigorria "le llevan el auto al corralón porque no tenía la transferencia hecha". Y agregó que "ella comienza con todo el derrotero de los trámites y una vez que finalizó con todo eso, simple y llanamente le dijeron que lo habían compactado".
El letrado reconoció que "pasó un año", desde que le llevaron el auto hasta que lo redujeron a chatarra. "La Municipalidad ahora tiene programada una compactación cada cinco o seis meses, pero debe tener en cuenta a la gente que no deja abandonado el auto, que está haciendo trámites para recuperar el auto", indicó.
Gastaldi contó que se trata de "una familia humilde y trabajadora, viven en Granadero Baigorria y usaban el vehículo para sus trámites diarios".
Respecto de la demanda, informó que "estamos reclamando lo que vale el auto en el mercado, unos 50 mil pesos, más los gastos, que son entre 15 y 20 mil pesos más". Y admitió que "no es fácil que la Municipalidad indemnice a los ciudadanos por este tipo de hechos, el juicio dura un añito".
La versión municipal
Stella Splendiani, directora del Tribunal Municipal de Faltas, dio otra versión de los hechos. La funcionaria describió que el auto "ingresó al corralón el 14 de marzo de 2016, lo conducía un muchacho que no era el dueño. Tenía el parabrisas roto y no contaba con la documentación".
Splendiani comentó que "aquellos vehículos que pasados los 6 meses que están en el depósito y no se presenta el titular registral, en base al listado que tenemos consultamos al Registro Automotor".
"El día 21 de abril de 2017 fue notificado el titular registral; la notificación fue recibida por su esposa", dijo luego. Y añadió que "se informó públicamente el listado de los vehículos que iban a compactación".
"Esta persona que ahora reclama, no cumplió ninguno de los pasos que se le piden a alguien que quiera retirar su vehículo", aseguró la titular del Tribunal de Faltas. Y estableció que "el titular registral nunca se presentó".
Por último, Splendiani defendió la postura municipal aclarando que el auto "entró en marzo de 2016 y fue compactado recién en julio de 2017".
Le llevaron el auto al corralón y lo encontró “compactado” (Ariel Gastaldi)