Tiago Silveira es un chico brasileño que se hizo conocido en todo el mundo por una foto. En la imagen se lo ve bañándose en una laguna junto a dos jaguares. Uno de ellos aparece como si lo estuviera "abrazándolo". La foto se volvió viral, y despertó dudas sobre su autenticidad.
Pero es real e ilustra una escena habitual para Tiago, que vive y juega con jaguares desde que es un bebé.
"Tengo algunos amigos que me dicen que la imagen es falsa, pero a muchas otras personas les gusta y quieren conocer a los jaguares. Es bueno mostrar algo de mi experiencia a quienes no han tenido tanta suerte como yo”, le dijo el chico de 12 años a BBC Brasil.
La relación de Tiago con los jaguares surge a partir de que sus padres, Leandro Silveira y Anah Jacomo son biólogos que coordinan el Instituto Jaguar de Brasil (IOP, por sus siglas en portugués), en el estado de Goiás.
"Mi hijo nació en un ambiente con jaguares y aprendió a lidiar con ellos desde que era un bebé. Obviamente ponemos límites, pero él ya sabe cómo comportarse. Es muy natural para él", explica Silveira, quien publicó la famosa foto.
"Es una relación de amor y respeto. Siempre me gustó ayudar a mis padres a cuidar de los animales", dice Tiago.
"Estos animales no tienen a los humanos como presa. Reaccionan ante nuestras acciones, por lo que es importante respetarlos. Su lenguaje corporal te dirá si no quieren que te acerques", sostiene el padre.
La madre de Tiago dice que nunca hubo un incidente entre el niño y los jaguares. También resalta que nunca dejó a su hijo solo con ellos.
Más de 30 jaguares pasaron por la reserva de los padres de Tiago en la última década.
Actualmente, la familia cuida 14 jaguares, incluyendo cuatro cachorros y ocho adultos. Y durante la última década, atendieron a 35 animales.
El jaguar es uno de los animales que integra la Lista Roja de Especies Amenazadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza.
Aunque están presentes en 21 países, se estima que Brasil alberga a casi la mitad de su población, entre 20.000 a 30.000 animales.
La foto que se volvió viral fue tomada el 15 de noviembre.