La obesidad y el sobrepeso son consecuencia directa de los hábitos alimenticios y sedentarios de las personas, sin embargo también puede existir un componente genético. Pero además, un nuevo estudio sugiere que las abuelas también tienen parte de la culpa, al seguir habitualmente una dieta que favorece la obesidad, y condicionar la salud de sus nietos. Al menos eso ocurre en ratones.
Investigadores de la Escuela Politécnica Federal de Zurich hicieron un experimento con hembras de ratón, a las que alimentaron con una dieta rica en grasas antes de quedarse encintas y durante el tiempo que estuvieron preñadas.
Sus descendientes varones fueron apareados con hembras que seguían una dieta baja en grasas, y lo mismo sucedió con los machos descendientes de esa generación, según publicó el sitio New Scientist.
Al analizar los resultados, se encontraron con que tanto los nietos como los bisnietos de las ratas que siguieron la dieta rica en grasas, mostraban comportamientos adictivos hacia la comida y sobrepeso.
No obstante había diferencias entre las hembras y los machos, ya que aunque las nietas y bisnietas también comían demasiado, la obesidad parecía afectar solo a los descendientes de sexo masculino. ¿Pasará lo mismo en humanos?
