La detenida dirigente de la Tupac Amaru, Milagro Sala, fue internada este martes en una clínica de la capital jujeña para realizarse distintos estudios médicos y chequear su estado de salud, tras el nuevo encarcelamiento que se le dictó hace dos semanas, cuando revocaron la prisión domiciliaria.
La medida fue dictada luego de que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) reiterara que el Gobierno es el responsable por la “salud física, psíquica y moral” de la líder de la organización social.
Sala fue trasladada desde el Penal de Alto Comedero a la Clínica Los Lapachos, la misma que había sido requerida por su defensa y rechazada la semana pasada por el juez Isidoro Cruz.
Al final, la autorización de la internación en la clínica de la capital provincial fue firmada por Pablo Pullen Llermanos, el mismo que la había trasladado a Sala a Alto Comedero, luego de quitarle el beneficio de la prisión domiciliaria en su vivienda del barrio La Ciénaga.