El candidato socioliberal Emmanuel Macron ganó este domigno las elecciones presidenciales francesas con unos 30 puntos de ventaja sobre su rival, la ultraderechista Marine Le Pen, según las primeras proyecciones de los institutos demoscópicos.
De acuerdo con las estimaciones sobre voto real ofrecidas por los medios franceses que reproduce la agencia EFE, Macron obtuvo un 65 % de los votos, frente al 35 % que consiguió Le Pen, con una participación históricamente baja de en torno al 75 %.
Los resultados de Macron, mejores que lo que las encuestas habían pronosticado en las dos semanas entre la primera y la segunda vuelta, oscilan entre el 65,1 % que le otorgan las estimaciones de la casa Ipsos difundidas por el canal público "France 2" y el 65,9 % que le da el instituto Elabe, según el canal de información "BFMTV".
Otras proyecciones, como la realizada por Sofres para "TF1" o la de Ifop para "CNEWS", también sitúan al socioliberal en el umbral de conseguir el apoyo de dos de cada tres franceses.
La participación, que estaría entre el 74 % y el 75 %, es la más baja registrada en la segunda vuelta de unas elecciones presidenciales en Francia desde 1969, cuando obtuvo la victoria Georges Pompidou.
En defensa "de Francia y Europa".
Macron se dirigió, en un primer discurso grave y solemne, a sus compatriotas para garantizarles que trabajará por la "unidad de la nación" y que defenderá "a Francia y a Europa".
Solo, desde el cuartel general de su campaña, el socioliberal -que según las estimaciones batió a su rival, Marine Le Pen, por 30 puntos- aseguró que la "base" de su mandato será la "regeneración de la vida pública", al tiempo que prometió que "trabajará para restablecer los vínculos entre Europa y los ciudadanos".
"Defenderé Francia, sus intereses vitales y su imagen. Asumo el compromiso delante de vosotros. Defenderé Europa. Está en juego nuestra civilización, nuestra manera de ser libres" dijo.
El presidente electo garantizó también que Francia estará "en el primer rango de la lucha contra el terrorismo", tanto en su propio terreno como a nivel internacional, "todo el tiempo que dure ese combate".
Macron, exministro de Economía del todavía mandatario socialista François Hollande, apuntó que "una nueva página" de la "larga historia" del país se abre este domingo tras la segunda ronda de las presidenciales, y quiso que sea "la de la esperanza y la confianza".
"Pelearé con todas mis fuerzas contra la división que nos debilita y abate. Queramos a Francia, a partir de esta noche y durante los próximos cinco años. La serviré en vuestro nombre, con humildad y entrega", señaló.
Macron, a quien las proyecciones de voto dan como ganador con un porcentaje cercano al 65 %, saludó a su contrincante, y dijo estar dispuesto a escuchar "las divisiones que han conducido a algunos a votos extremistas".
"Construiremos un futuro mejor", añadió en esa breve declaración televisada, en la que subrayó que será "digno" de la confianza acordada y señaló estar dispuesto a "unir a todos" para superar "los desafíos".