Con el calor del verano y las tormentas regulares las plantas se ven afectadas. Deshidratación por un lado y exceso de agua por otro, se suman a problemas como los vientos fuertes y las eventuales caídas de granizo. El riego, la clave de un buen jardín.

Se sabe que el exceso de humedad es perjudicial para las plantas dado que empobrece la tierra, provoca enfermedades y puede hasta marchitarlas. El jardinero Daniel Latuca, consultado por Rosario3.com, explicó que en un verano como el actual donde “tenemos lluvia cada 35 horas” el tema del riego puede marcar la diferencia en un jardín. Más allá de la caída de agua “rara para esta época” según Latuca, hace que se deban tomar mayores precauciones: “Hay que controlar a diario la falta o exceso de humedad en la tierra”.

La razón se centra en que el clima actual produce un “proceso de desgaste en la primera capa de las hojas, dado que con las lluvias que a veces se dan a la madrugada hace que el agua acumulada en las hojas se caliente con el sol y termine por perforarlas”, explicó el jardinero. Sin embargo, más allá de la caída copiosa de lluvia “no podemos abandonar el riego”, aseguró el especialista. “Hay que controlar la tierra de macetas todos los días poniendo el dedo en la tierra. Si sale barroso o marrón no hay que agregar líquido, si sale seco, sí”, explicó Latuca.

En relación a los jardines cuyo riego es por aspersión, “en época de lluvia hay que reprogramar unos minutos menos”. Así mismo el tema del corte del césped tiene también sus secretos según comentó Latuca: “Con el calor, la lluvia y posible caída de granizo, el pasto debe mantenerse a 3 cm sobre el punto normal para que no se deterioren las raíces y se seque”.

Plantas de interior

A diferencia de la creencia popular de sacar las plantas los días de lluvia, esto puede ser dañino para las mismas. “Es común ver a gente que ante la probabilidad de lluvia saca las plantas afuera, eso no es bueno, lo mejor es recolectar el agua en algún recipiente y luego regarlas”.

Para Latuca el cuidado de las plantas tanto de interior como de los espacios verdes exteriores, el cuidado debe ser permanente “no existe un jardín sin mantenimiento” afirmó y agregó: “El jardín no cuesta, el jardín vale”, en referencia a la importancia de un espacio verde bien mantenido en las casas.