Los ronquidos afectan seriamente la calidad de descanso y de vida de quien los sufre, y también son un grave problema a la hora de dormir en pareja. Más allá del tratamiento con especialistas, existen remedios caseros y naturales que pueden ayudar a combatirlo. El sitio Mejor con Salud recomendó cinco de ellos.
Menta poleo: esta hoja verde es muy efectiva cuando la causa es una cuestión temporal como un resfriado o una alergia. En esos casos podemos recurrir a esta solución natural, casera y sencilla, ya que la menta contiene mentol, un principio curativo muy beneficioso para el aparato respiratorio. Se recomienda tomar en infusiones antes de acostarse.
Miel de abeja: es un antibiótico muy poderoso gracias a su gran riqueza en vitaminas, minerales, oligoelementos y enzimas, siempre que sea de calidad orgánica. Si tomamos una cucharada de miel antes de acostarnos despejaremos las vías respiratorias y evitaremos los ronquidos. También se puede ingerir disolviéndose en té.
Cebolla: este alimento es antiinflamatorio y expectorante, de modo que también es útil en caso de gripes y resfriados. Puede cortarse por la mitad y ponerse en la mesita de noche al acostarnos; preparar una infusión o caldo de cebolla y tomarlo por la noche; elaborar un jarabe de cebolla.
Infusión de especias: el jengibre, la canela y la cúrcuma son tres ingredientes excelentes para desinflamar la garganta inflamada, aportar calor al organismo y evitar la congestión. Además, estas especias ayudan a subir las defensas, reducir los niveles de azúcar en sangre, acelerar el metabolismo y perder peso con más facilidad.
Inhalación de eucalipto: esta planta medicinal ayuda a eliminar la mucosidad, descongestionar los bronquios y los pulmones y relajar la garganta. Se puede utilizar en vahos o inhalaciones, o en aceites aplicados al pecho y garganta.