Perica es una perra dogo que fue rescatada de una casa en la que el dueño no la alimentaba. La inquietud de un vecino que dio aviso sobre el maltrato animal a la que era sometida, le posibilitó ser rescatada y recuperada. La historia.
El trabajo en el terreno fue realizado por la Dirección de Proximidad (dependiente de la Secretaría de Control), en conjunto con la Oficina de Protección y Bienestar Animal y un médico veterinario de la Dirección de Control Urbano. Acudieron acompañados por agentes de la Brigada de Rescate de Animales de la Policía de la Provincia de Santa Fe.
En De 12 a 14 (El Tres) presentaron a Perica, una perra dogo con aspecto saludable y juguetón. Sin embargo, tuvo un pasado muy difícil. De acuerdo a lo que confirmó Sabrina Latino de Control, recibieron un llamado del 147 en el que un vecino denunció que había un perro maltratado. “Fuimos e hicimos la constatación con tanto dolor. Era un domicilio particular. Fuimos junto a un veterinario”, precisó.
Según contó, el hombre que estaba a su cargo, soltó un “me dejé estar con la perra”, ante la intervención estatal. La escena con la que se encontraron fue a la perra encerrada en un patio, acostada sobre un cúmulo de arena, sin comida ni agua accesibles. “No tenía nada, no tenía vacunas, y estaba llena de pulgas y garrapatas, estaba desesperada de hambre y por una caricia”, manifestó.
Integrantes de la organización no gubernamental Felinos callejeros, se hicieron cargo de la perra a la que llamaron Perica. “Estaba muy asustada, no se dejaba tocar, tenía la cola entre las patas. Le empezamos a dar cariño, a sacarla a pasear y ella empezó a dar cariño también”, comentó Lucas.
“La raza no tiene que ver, todos dan amor”, advirtió y destacó que pudieron sacarla de su estado de desnutrición con alimento y atención veterinaria. Aunque no suelen rescatar perros, hacen excepciones como en este caso. Ahora, Perica necesita un hogar.
Quienes deseen colaborar, pueden comunicarse a felinoscallejerosrosario