La fuerza del amor se sintió en Tribunales luego de que la jueza de Familia, Alicia Galetto, diera lugar al pedido de un hombre: adoptar legalmente a la hija de su pareja quien conservará el apellido del padre biológico que se opuso a dicha adopción. 

Según detalló le periodista rosarino especialista en Judiciales, Alberto Furfari, la pareja se conoció hace cuatro años y a principios de 2024 sellaron la historia casándose. El sentimiento de familia estuvo presente desde el inicio y la hija mayor de edad de ella encontró en él una figura paternal ya que su papá de sangre nunca estuvo muy presente. Cuando era chica, lo veía únicamente los domingos. Luego, perdieron contacto por mucho tiempo y al retomarlo, los encuentros pasaron a ser una vez al mes. 

Motivo por el que la abogada Alicia Colazo comenzó una demanda de adopción y pese a que el padre biológico se negó, Galetto apostó al deseo de los participantes y en la resolución del caso dijo “en la adopción de integración no se pretende extinguir, sustituir o restringir vínculos, sino todo lo contrario: ampliarlos mediante la integración de un tercero que no fue primigeniamente parte de la familia”.

Vale aclarar que la adopción de integración es una modalidad legal en Argentina que permite adoptar al hijo del cónyuge o conviviente. Esta figura jurídica busca reconocer las familias ensambladas como un nuevo modelo familiar. Y se puede solicitar cuando el progenitor biológico está ausente de la vida de los hijos; el progenitor biológico rechaza a los hijos o se dan fallos de triple filiación.