Florencia Andrade es una joven cordobesa que fue operada en diciembre por un diagnóstico de cáncer de mama y ahora está en la etapa final del tratamiento de quimioterapia. En este marco, la conmovió una situación que le tocó vivir cuando fue a renovar la licencia de conducir: en el carnet imprimieron el diagnóstico de la enfermedad que padeció y se lo otorgaron solo por dos años. La Agencia Nacional de Seguridad Vial aclaró que no corresponde estampar en el plástico la patología. Rosario3 habló con Florencia para poder reconstruir la historia completa y para entender por qué se cometió semejante error. 

El revuelo comenzó cuando Florencia contó en su cuenta de Twitter que el lunes fue a renovar la licencia de conducir. Al iniciar el trámite le preguntaron por qué tenía el pelo tan corto. Cuando respondió que estaba siguiendo un tratamiento oncológico, le pidieron un certificado de aptitud de un médico.

Ella explicó que la última quimioterapia la tuvo en junio. "Me dicen que no me pueden dar el carnet. Que necesitan apto médico. Y que si me lo daban, solo sería por dos años ya que no saben cómo estoy de defensas. Quise mostrar mis análisis que siempre dieron perfectos (nunca bajé defensas), y me dicen que no. Le cuento que ya estoy con las pastillas preventivas y nada tampoco", explicó en su tuit que se hizo viral.

Flor, fue contactada por Rosario3 y explicó la situación: "A mí me trataron bien, no tengo nada para decir de eso. Mi tristeza y enojo fue por cómo se dio todo. Yo sé que ellos están cumpliendo con normativas pero no me parece que sean las adecuadas", confió. Y aseguró que al ver el diagnóstico de su enfermedad en el carnet se sintió "incapacitada".

"Ellos me pidieron disculpas al pedirme el apto médico pero yo me sentí incapacitada. ¿Qué pasa que sólo son dos años por tener una enfermedad?",  cuestionó la joven.

Para Florencia "no son las formas" para abordar la situación de personas en tratamiento oncológico. "El carnet es un documento público que lo utilizan en un control de tránsito. Si yo tuviera dificultad en la vista u otra discapacidad que me impida manejar, sí se tendría que poner. En mi caso nunca tuve problema en contar mi enfermedad, pero hay gente que prefiere pasarlo en silencio y no hacerlo público, por eso me parece medio abusivo que lo pongan en el carné", dijo.

Asimismo, Florencia explicó que luego de contar su experiencia en Twitter, mucha gente en la misma situación le escribió para sacarse dudas: "Lo utilicé como un servicio".

Desde la Agencia Nacional de Seguridad Vial explicaron a Rosario3 que las patologías no deben estar impresas en el carnet de conducir y que ya se pusieron en contacto con Florencia para corregir la situación. 

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