En Rosario la canasta básica familiar ya supera el millón de pesos y la de los jubilados trepó a más de 500 mil. En ese contexto, desde el Centro de Educación, Servicios y Asesoramiento al Consumidor (CESyAC) remarcaron que, pese a que “desaceleraron los números de la inflación, todavía la situación es muy complicada”. Además, advirtieron sobre el aumento de un 12 % de los medicamentos para personas mayores y vaticinaron que el tratamiento de la ley Bases “podría afectar mucho en los precios”.
En conversación con Cada Día (El Tres) Ignacio Pandullo dio cuenta sobre los resultados que arrojó el último análisis que llevó a cabo la asociación civil que trabaja principalmente en la defensa de los derechos de usuarios y consumidores. “El dinero no alcanza, los salarios quedaron atrasados y el comerciante no vende. Con lo cual, hay que atender a esta situacion porque sino el número puede estar muy bueno, pero, no se traduce a una mejora de vida para todos”, aseveró.
“La canasta familiar en Rosario es de $1.099.822, el aumento fue de un 3,67 por ciento. Por su parte, la de jubilados, subió un 3,61 por ciento y tiene un costo total de $507.000”, explicó.
Sobre este punto, Pandullo aclaró que “si bien estamos hablando de valores bajos que muestran una desaceleración, y es una buena noticia, todavía la situación es muy complicada”.
“Hay una merma en el consumo, que implica una recesión. Lo primero que se escucha en los comerciantes es la queja, nos dicen «bajo porque no vendo». Por otro lado, el divorcio, que es la distancia entre el salario del trabajador y la canasta. Hay desaceleración , si, pero el dinero no alcanza”, profundizó.
Sobre cómo se llevó adelante el análisis, comentó que se trata de un estudio “integral”. “Se evalúan todos los costos de vida. Alquiler, impuestos, servicios, medicamentos, alimentos, insumos básicos”, dijo y alertó: “Hay aumentos que preocupan mucho, por ejemplo, en el ámbito de los jubilados los medicamentos aumentaron un 12 %”.
En palabras de Pandullo, “hoy estamos viviendo las consecuencias de un diciembre muy duro para todos, con números exorbitantes”. “A partir de ahí empezó un camino descendente que hoy está bajando pero todavía falta la otra parte de la película: cómo recuperamos el salario”, señaló.
Sobre esa línea, ahondó: “De mayo 2023 a mayo de este año, el aumento fue 256 %, es decir, de un año a otro necesitamos 700 mil pesos más para comprar lo mismo y ninguna paritaria pudo equiparar eso. Menos aún los trabajadores que no están registrados. En muchos casos, incluso, se han quedado sin trabajo”.
A modo de cierre, destacó que, si bien es una “buena noticia que el número de inflación baje”, alertó sobre lo que “pasa en la economía real, cuando uno habla con la gente”. “Ahí está la clave”, sostuvo.
A su vez, aclaró que “esto es un día a día”, ya que hay distintos factores políticos que pueden repercutir, como la ley Bases.