Desde mediados de mayo la municipalidad de Rosario intensificó los operativos de control sobre el espacio público con el objetivo de identificar y averiguar antecedentes de los cuidacoches que operan en distintas zonas de la ciudad. Como resultado de estos procedimientos, se identificaron a 250 personas y hubo 8 detenciones.

“Sabemos que este es uno de los temas más demandados por la ciudadanía. Y es por eso que estamos trabajando con tanta fuerza. Seguiremos adelante con firmeza en el control del espacio público y bregando por una buena convivencia. No vamos a permitir que ningún ciudadano tenga que encontrarse con personas alcoholizadas, agresivas o que extorsionen en la vía pública", expresó el titular de Control y Convivencia, Diego Herrera.

En ese sentido, desde esa área municipal señalaron que “los operativos buscan prevenir el uso indebido del espacio público, como la colocación de elementos que se utilizan para realizar la reserva de calzada y el lavado informal de vehículos”. 

Con respecto a los detenidos, desde el municipio remarcaron que en algunos casos se dieron porque las personas identificadas tenían pedido de captura activo. En tanto que también hubo demorados por generar disturbios, extorsionar, amenazar o agredir a vecinos o al propio personal municipal. “También hubo dos situaciones en las que se hallaron armas blancas y pinzas para cortar cables y cadenas”, resumieron.

Además, también destacaron que esta cantidad de personas detenidas en los primeros seis meses del año, es la misma que durante todo el 2023.

“El acompañamiento policial permite que se aborden también acciones dentro de su incumbencia como el cobro de tarifa fija o situaciones de violencia, actos que constituyen delitos. Todo se realiza en el marco del nuevo Código de Convivencia con las competencias, facultades y alcances que el mismo establece”, explicaron. 

Chatarrerías y Alcoholemia

En el resúmen semestral, desde Control y Convivencia también detallaron que se incrementaron un 30% los controles de alcoholemia que en el mismo período del 2023.

“La cantidad de controles de alcohol realizados por la Municipalidad creció de 17 a 22 mil y el porcentaje de positivos cayó por debajo del 4%. Se estima que este año puede haber un récord histórico quebrando la barrera de los 40 mil controles anuales”, anticiparon.

En total, en lo que va de 2024, fueron controlados 49.397 vehículos. Un total de 8.410 fueron remitidos. En la mayoría de los vehículos remitidos al depósito municipal se pudo constatar incumplimientos en materia de seguridad vial y documentación. Además, hubo 4 detenciones a conductores que se escaparon, opusieron resistencia en el operativo o conducían vehículos con pedido de captura. 

“Es clave la sintonía con la que se viene trabajando tanto con Provincia como con las Fuerzas Federales dispuestas por Nación, lo que nos permite desplegar en el territorio nuestro potencial y llegar con una fuerte presencia a todos los puntos de la ciudad”, sostuvo Herrera.

También se realizaron 261 controles de Narcolemia, generando 40 resultados positivos. Cabe destacar que sólo se realiza un control de narcóticos cuando el conductor no ha dado positivo en el test de alcoholemia y, según el análisis ocular del médico que está presente en los operativos, el conductor podría estar en una situación de conducción bajo los efectos de alguna sustancia.

Además, se informó que en este primer semestre un total de 203 remises ilegales fueron remitidos al corralón.

Con respecto a las chatarrerías, desde la secretaría de Control destacaron que desde el mes de enero hasta junio de este año se inspeccionaron 65 comercios de este tipo. De ese total, 25 fueron clausurados. El guarismo marca un incremento en relación al mismo semestre de 2023, cuando se habían clausurado 18.   . 

“Vamos a seguir actuando y haciendo este tipo de procedimientos conjuntos. Los buenos resultados ya están a la vista. Continuaremos con un trabajo diario de control sobre chatarrerías y así hacer nuestro aporte para evitar todo tipo de hechos ilegales. Este es el segundo eslabón de la cadena delictiva. Son quienes compran para luego vender”, explicó el funcionario.