Una familia mendocina vivió horas de angustia y dolor cuando desde la Clínica Santa María les informaron que la señora María Dora Garro había fallecido. Se contactaron para transmitirles la triste noticia y avisarles que estaba firmado el certificado de defunción. Una vez que el cuerpo estaba sepultado, en el nosocomio comprobaron que en realidad María Dora estaba viva y desconocían la identidad de la persona que fue enterrada. Así lo relató la nieta de la mujer en su cuenta de Facebook.
"Hace 10 días mi tío llevó a mi abuela a su médico de cabecera de la CLÍNICA SANTA MARÍA, por un fuerte dolor de espalda, la revisaron y la mandaron a la casa con medicación. El día lunes 7/09/2020 mi abuela estaba con un fuerte dolor de pecho, por lo que decidieron volver a llevarla a la clínica, la dejaron internada diagnosticándole principió de neumonía. Desde ese día no pudimos volver a verla", escribió su nieta Shirley Hernández.
El relato continuó describiendo el momento más dramático. "El jueves 10/09/2020 a las 01:30 hs recibimos el llamado con la noticia de que mi abuela había fallecido y en su acta de defunción dictaba fallecida por covid - 19, entre otras. Con todo el dolor del alma ese mismo día a las 15:30 hs. la enterramos, sufriendo el trauma y el dolor de esa situación".
Después de vivir esa situación tan dolorosa, Shirley y sus familiares fueron sorprendidos por una nueva notificación de parte de la clínica. "El día de hoy, viernes 11/09/2020 a las 15:00 hs. aproximadamente volvemos a recibir un llamado de la clínica, diciendo que mi abuela está viva, pidiendo por sus hijos. Por tal motivo y con extrema urgencia se dirige mi tio a la clínica a reconocer si verdaderamente mi abuela estaba viva. Efectivamente y a Dios gracias, mi abuela vive", precisó la joven.
En la publicación, Shirley adjunta las pruebas del acta de defunción y el video de su abuela, después de la terrible confusión. En la clínica aún no pudieron confirmar la identidad del cuerpo que fue sepultado.