Uno de los hechos más debatidos este martes en la audiencia contra el ex jefe de fiscales Patricio Serjal fue la constatación del encuentro mantenido entre el ex funcionario judicial con Leonardo Peiti, miembro de una banda dedicada a juego clandestino y extorsiones. No solo porque se buscaba determinar si efectivamente hubo una reunión entre ambos, sino por cómo se dio el viaje y en qué contexto.
Según la acusación de los fiscales Matías Edery, Luis Schiappa Pietra, Gisela Paolicelli y María Eugenia Iribarren, hubo dos encuentros entre Serjal y Peiti. Los dos fueron el año pasado. El primero en el bar Safyta de Dorrego y Mendoza tras una balacera contra un domicilio de Peiti. El segundo fue en un hotel de Recoleta, donde se sospecha que el ex fiscal regional pidió un "aumento de la cuota" o coima a Peiti.
Para la segunda reunión en el hotel Etoile de Recoleta, Serjal viajó el miércoles 13 de noviembre y regresó el jueves 14 de noviembre a Rosario. Lo hizo en días laborales y no pidió licencia. Además, usó el vehículo oficial Toyota Corolla dominio AC784ZF y chofer. Sin embargo, los fines de dicho viaje fueron exclusivamente recreativos.
Serjal no solo no pidió licencia, utilizó chofer y vehículo oficial para un viaje recreativo; también pidió el reintegro de las cargas de combustibles hechas en el viaje, tickets que constan por valores de 2.780 y 2.923 pesos. Ese dinero se le reintegró a través de un cheque con fondos de la Dirección de Administración de Economía y Finanzas de la Fiscalía General.
Si bien no existe una foto del encuentro entre Serjal y Peiti, el material indiciario sugiere que ocurrió. ¿Cuáles son las evidencias? Serjal hizo el check in el 13 de noviembre en el hotel Etoile y el check out el 14 de noviembre. Peiti, por su parte, hizo el check in y check out el mismo 14 de noviembre.
Serjal no viajó solo. Lo acompañó un amigo, a quien se le tomó declaración testimonial. Mostró fotos de tragos y comidas consumidas en el hotel Etoile –para afirmar que fue un viaje de recreación– y señaló que el jueves 14 de noviembre "lo estuvo esperando un rato en el desayunador". Se sospecha que esa demora se debió a que estaba reunido con Peiti.
Entre ese 13 y 14 de noviembre del año pasado en Rosario hubo 50 consultas de la Policía a la unidad de Flagrancia en turno. En ese mes hubo un total de 15 crímenes en la ciudad. Estos datos fueron ventilados por el fiscal Luis Schiappa Pietra, quien indicó: "Hubo varios homicidios en el mes de noviembre pasado, pero se ve que no le importaba mucho (a Serjal) porque se fue según su acompañante a «cortar la semana»".
Como Serjal explicó en la audiencia en su contra que el viaje a Buenos Aires fue supuestamente para concretar un convenio de la Fiscalía por delitos informáticos, Schiappa Pietra retrucó y dijo: "Fue un viaje con fines personales. La reunión que dijo, fue a la noche no sé con quién. Dijo que fue por un trabajo, pero no dice la trascendencia. Y se contrapone con lo que dijo la persona que lo acompañó, que dijo que fueron medio de joda".
"Serjal no tenía consideración por las arcas del Ministerio Público de la Acusación, pero sí por las propias", apuntó Schiappa Pietra con respecto al uso de dinero público para pagar la nafta para hacer un viaje personal.
Más información