Los alrededores de la capilla ardiente de Londres se encuentran colmados por una multitud de personas que van a darle el último adiós a la reciente difunta, la reina Isabel II. Entre los presentes de las últimas horas en el lugar, estaba David Beckham.
Si bien es una de las grandes figuras del fútbol británico con un reconocimiento mundial, el ex futbolista se mostró como un "ciudadano más" entre los miles que esperaban en una fila que, según dijeron los medios ingleses, superó los siete kilómetros y la espera duró 12 horas.
Beckham es el protagonista de una carrera deportiva que duró más de veinte años y en la actualidad, es el dueño del club Inter Miami de la MLS. Según contó a Sky News, "le tenía un cariño muy especial a la monarca", quien en el año 2003 lo condecoró con la Orden del Imperio Británico.
"Este día siempre iba a ser un día difícil. Nuestros pensamientos están con la familia, es muy especial escuchar todas las historias de la gente aquí. Tuve tanta suerte de poder tener algunos momentos así en mi vida para estar cerca de Su Majestad. Es un día triste, pero un día para recordar", expresó David.
Vestido con una gorra plana oscura, traje y corbata los testigos contaron que el exfutbolista se prestó a las selfies y varios fanáticos se fotografiaron con David en medio de la espera.