El ministro de Justicia y Seguridad Pública de Brasil, Flávio Dino, vinculó los ataques a escuelas, el último el miércoles, en Blumenau, con la proliferación de mensajes de odio y la violencia mediante redes sociales, y anticipó que ordenará a la Policía Federal investigar a grupos nazis y neonazis en el país, porque "hay indicios de coordinación interestatal de estas agrupaciones.
"El conjunto de causas que lleva a la ampliación de las tragedias es bien visible: proliferación de odio en la sociedad, incluso por parte de una Internet desregulada y con empresas irresponsables; incentivos a las armas y a la ideología de la muerte; grupos nazis y neonazis", expresó el ministro en Twitter.
En ese sentido, subrayó que el Ministerio estaba tomando medidas para combatir los ataques en las escuelas y anticipó que la información se irá actualizando día a día.
"Ahora he firmado una determinación para que la Policía Federal inicie una investigación policial sobre las organizaciones nazis y/o neonazis en Brasil, ya que hay indicios de acción interestatal. Hay una posible configuración de delitos prevista en la Ley 7.716/89, que contempla los delitos resultantes de la discriminación por motivos de raza, color, etnia, religión u origen nacional.
Dicha ley prevé una pena de dos a cinco años de prisión, además del pago de una multa y prestación de servicios a la sociedad, informó el portal brasileño UOL Noticias.
El texto enumera varias situaciones en las que el autor de los delitos puede ser sancionado, entre ellas cuando se cometen lesiones, se impide el acceso a servicios públicos, establecimientos comerciales o incluso se le deniega el empleo en empresas privadas.
El anuncio llega un día después de que un hombre de 25 años invadiera una guardería en Blumenau, en el estado sureño de Santa Catarina, y matara con un hacha a cuatro niños de entre cuatro y siete años, tras lo cual el agresor se dirigió por su voluntad a una comisaría y se entregó.
Diez días atrás, un adolescente atacó una escuela pública en San Pablo, dejando una profesora muerta y otras tres maestras y un alumno heridos.
Tras los ataques, el Gobierno se comprometió a crear un grupo interministerial que estudiará medidas para reforzar la seguridad en las escuelas.
Los cuatro niños asesinados en el ataque del miércoles en la guardería de Blumenau fueron sepultados este jueves, en una ceremonia cargada de tensión en la que los familiares declinaron hablar con la prensa.
Otros cuatro niños heridos en el ataque recibieron el alta médica, informó en un comunicado el Hospital Santo Antonio, donde pasaron por cirugía.
"Los cuatro niños recibieron el alta y ya están con sus familiares (...). Uno de los pacientes presenta una lesión en la mandíbula, que será tratada de forma ambulatoria", informó el centro médico.
Desde ayer familiares y vecinos de Blumenau se acercaron para rendir homenaje a las víctimas depositando flores y osos de peluche frente a la guardería, y realizaron una vigilia con velas y rondas de oración.
"No tengo palabras para expresar lo que siento... volvimos a nacer" , dijo a la AFP la ingeniera Fernanda Bubniak Schramm, de 41 años, madre de una niña que resultó ilesa.
"Cuando supe (del atentado), llamé a la maestra y me dijo que mi hija estaba bien, que había encerrado a varios niños dentro del baño. Es una heroína", dijo en referencia a la profesora Simone Aparecida Camargo, que protegió así a varios de sus alumnos.