La meningitis es una patología grave que, principalmente, afecta a niños pequeños. Si no se trata a tiempo, puede presentar consecuencias irreversibles. En lo que va de 2024, se registraron 34 casos de meningitis bacteriana según el Informe Epidemiológico de Santa Fe.

Esta cifra es alarmante debido a que se duplicaron los casos registrados respecto del mismo período del año anterior, y la mayoría de ellos pertenece al serogrupo B. Además, el 26,4% de infectados fueron menores de 1 año, y el 23,5% tiene entre 5 y 9 años de edad.

Meningitis bacteriana

Se trata de una infección grave localizada a nivel de las meninges que recubren el cerebro. Por su parte, el meningococo serogrupo B es un tipo de Neisseria meningitis que tiene varios inmunotipos distintos y es el prevalente en Argentina, especialmente en menores de 5 años.

La enfermedad meningococica tiene una mortalidad del 50% si no se trata con antibióticos, y del 10 al 14% en caso de recibir tratamiento. Quienes sobreviven, sin embargo, lo hacen padeciendo alguna amputación, convulsiones, trastornos sensoriales o emocionales, entre otras secuelas.

La importancia de la prevención

Los expertos resaltan que de los brotes de infecciones invasivas meningocócicas participan distintos serogrupos, como A, B, C, W e Y y, dentro de ellos, algunos genotipos tienen más capacidad de transmisión. Asimismo, factores como la cantidad de personas susceptibles y la cobertura de vacunación son claves para controlar que la enfermedad se propague.

En Argentina, menos del 80% de niños menores de 15 meses y 60% de adolescentes reciben la vacuna cuadrivalente ACWY, la cual está en el Calendario Nacional. Además, la vacuna contra meningococo B está en el Calendario Nacional para huéspedes especiales. Sin dudas, la medida más efectiva para la prevención es la vacunación.

Síntomas

Los síntomas iniciales de la meningitis pueden ser similares a los de la gripe, pueden manifestarse durante varias horas o unos días y en cualquier persona mayor de dos años incluyen lo siguiente:

-Fiebre alta repentina.

-Rigidez en el cuello.

-Dolor de cabeza intenso.

-Náuseas o vómitos.

-Confusión o dificultad para concentrarse.

-Convulsiones.

-Somnolencia o dificultad para despertarse.

-Sensibilidad a la luz.

-Falta de apetito o de sed.

-Erupción cutánea en algunos casos, como en la meningitis meningocócica.

Signos en los recién nacidos

Los recién nacidos y los bebés pueden mostrar estos signos:

-Fiebre alta.

-Llanto constante.

-Mucho sueño o irritabilidad.

-Dificultad para despertarse.

-Inactividad o pereza.

-Incapacidad de despertarse para comer.

-Alimentación deficiente

-Vómitos.

-Una protuberancia en la fontanela (punto blando) en la parte superior de la cabeza del bebé.

-Rigidez en el cuerpo y el cuello.

 

Fuente: NA.