Una dosis de dos horas en la naturaleza tendría el mismo beneficio para nuestra salud que hacer 150 minutos de ejercicio por semana, según calculó un equipo de investigadores del Colegio Médico de la Universidad de Exeter (Reino Unido).
Los resultados forman parte de un trabajo por el que se entrevistaron a 20.000 ingleses sobre qué tipo de actividad habían realizado la semana previa. Según publicó la revista Scientific Reports, y reprodujo The Guardian, una cuarta parte de aquellos que habían pasado poco o nada de tiempo en la naturaleza reportó mala salud. Además, la mitad no estaba satisfecha con su vida, una pregunta que los médicos usan para medir el bienestar.
Por otro lado, solo una séptima parte de los que dijeron pasar al menos dos horas en la naturaleza consideraron tener una mala salud. Y solo una tercera parte de este grupo “estaba insatisfecha con su vida”. Lo bueno, para quienes no son muy apegados al ejercicio, es que según el estudio los beneficios son iguales para aquellos que salen a trotar en la naturaleza que para quienes prefieren sentarse en un banco a simplemente a contemplarla.
Los investigadores también se sorprendieron de que no importaba si las dos horas en la naturaleza se tomaban de una vez o en una serie de visitas más cortas, o si las personas iban a un parque urbano, bosques o a la playa. Otra cuestión que también mejora la salud física y mental es el vivir en un buen barrio, en lugar de una zona marginal.
Pero volviendo a la naturaleza, ¿por qué es tan beneficiosa? “La mayoría de las personas se encuentran bajo múltiples presiones en un momento dado. Así que cuando te vas a un entorno natural, es tranquilo, es relajante y te da tiempo para comenzar a procesar las cosas”, respondió el líder del estudio, Mathew White, y agregó que los estudios demostraron que cuando el sitio es de gran belleza natural, “baja los niveles de estrés”.