El hombre investigado como autor del femicidio de Daniela Cejas quedó en prisión preventiva. La medida cautelar fue impuesta por el juez de la Investigación Penal Preparatoria, Sergio Carraro, en el marco de una audiencia llevada a cabo en los Tribunales de la ciudad de Santa Fe.
El imputado es un hombre de 48 años cuyas iniciales son JES que era compañero de trabajo de la víctima. Ambos además mantenían “una relación sentimental”, manifestó la fiscal Ana Laura Gioria.
La prisión fue solicitada al juez por Gioria, quien tiene a su cargo la investigación del delito cometido el sábado 18 de enero en el inmueble en el que funciona la sede de la asociación civil Generar de la capital provincial.
La fiscal detalló que el juez dio por acreditada la calificación penal atribuida al imputado y agregó que “las testimoniales se fueron complementando una con otra y así se pudieron reconstruir los últimos minutos de la vida de Daniela”.
La funcionaria hizo hincapié en la declaración de un testigo que “dijo haber visto llegar sola a Daniela al inmueble en el que se cometió el delito, y que también vio al imputado sentado en el umbral de una casa vecina”.
Además, este testigo dijo que los vio ingresar a los dos juntos, tal como venía ocurriendo desde hacía varios fines de semana. En tal sentido, afirmó que “para nosotros es muy claro que el hombre que entró con ella al inmueble es el autor del hecho”.
“Tenemos probado que el hombre investigado asistió a las marchas realizadas para pedir justicia por el femicidio de Daniela y que tuvo contacto por chat con la hija de la mujer”, dijo la fiscal.
El pasado viernes, la fiscal Gioria le atribuyó al imputado la autoría del delito de homicidio calificado por el vínculo y por ser perpetrado por un hombre contra una mujer mediando violencia de género (femicidio).
En relación al femicidio, la fiscal sostuvo que “existía una relación desigual entre ambos, basada en la dominación y control que el hombre imputado ejercía respecto de Cejas. La modalidad que eligió para causarle la muerte da cuenta de una clara expresión de superioridad sobre la vulnerabilidad de la víctima y de denostación por su condición de mujer”, sostuvo.
Por otra parte, también se refirió a la agravante por el vínculo. “Además de ser compañero de trabajo de la víctima, el hombre investigado mantenía una relación sentimental con ella”, precisó la fiscal.