“Atento a los hechos de conocimiento público, el Club Atlético Rosario Central cumple en transmitir tranquilidad a su masa de asociados y simpatizantes”. De esa manera comienza un comunicado que este lunes emitió la entidad de Arroyito en relación a la detención del jefe de la barra brava canalla, Andrés “Pillín” Bracamonte, y del allanamiento en la sede administrativa de calle Mitre al 800.
Agrega que “la Institución, resultando ajena al proceso e investigaciones en curso, pero acatando debidamente las órdenes judiciales, ha exhibido ante la autoridad toda la documental en su poder y materia de la requisitoria”.
Dichos aportes, detalla el parte, son documentos tanto “de esta gestión y también de las anteriores, con la más amplia y activa colaboración, continuando a tales fines a total disposición de los funcionarios intervinientes”.
Bracamonte fue detenido este lunes por la mañana en su casa de Ibarlucea en una causa que lo investiga por presunto lavado de activos, tras el hallazgo, en abril pasado, de 2,5 millones de pesos en un allanamiento por otros casos.
Ahora le secuestraron más dinero, documentación, varios vehículos y dos taxis.
Por la tarde hubo otro procedimiento policial en la sede de Central de calle Mitre, donde personal policial y de Fiscalía incautó más material de interés para la causa, entre ellos facturas de empresas vinculadas a “Pillín” por “servicios varios” prestados al club, adelantó el fiscal a cargo, Miguel Moreno.