Este domingo a la madrugada y también en horas de la mañana, había un impresionante despliegue policial en la vecina localidad de Zavalla. La Policía irrumpió en una multitudinaria fiesta clandestina en el medio de un campo, cerca del cementerio local, y detuvo a 170 personas. Demoraron a una gran cantidad de jóvenes, entre ellos muchos menores de edad. Y detuvieron a los tres organizadores, oriundos de Rosario. Secuestraron dos colectivos, dispuestos para movilizar a los participantes de la fiesta ilegal, y gran cantidad de bebidas alcohólicas.
El operativo fue realmente impresionante. Fuentes policiales y testigos aseguraron que la comisaría de Zavalla se vio desbordada por la gran cantidad de demorados, que tuvieron que alojarlos en el galpón del ferrocarril, reconvertido en salón cultural por la comuna.
A partir de un llamado al 911 a las 3 de la madrugada, personal de la seccional 31 de Zavalla, con colaboración del Comando Radioeléctrico de Pérez y de Funes, organizaron un importante despliegue en el camino rural al cementerio local, entre la ruta nacional N° 33 y la provincial N°17.
Al irrumpir la policía en el lugar, se produjo un gran desbande de jóvenes que participaban de la fiesta clandestina. Sin embargo, los efectivos lograron detener a 170 personas, que estaban a bordo de dos colectivos, que fueron secuestrados.
Detuvieron a los tres hombres considerados los organizadores del evento ilegal, que viola el decreto nacional de distanciamiento social preventivo y obligatorio. Los tres son oriundos de Rosario. Dos de ellos tienen 40 años y el restante 25.
Según el detalle informado por la Policía, fueron 167 los jóvenes aprehendidos: 88 hombres mayores y 26 varones menores; y 33 mujeres mayores y 20 chicas menores de edad.
También se secuestró una impresionante cantidad de bebidas alcohólicas.
Interviene la Fiscalía de Flagrancia, a cargo del fiscal Urruticoechea.
