En la noche del martes hubo un tiroteo en el complejo de viviendas de Viamonte y Guatemala. El blanco de los disparos fue un local de ropa que resultó ser propiedad de una mujer imputada por asociación ilícita, pareja de un hombre de peso dentro de banda los Monos. La balacera destapó una situación calificada de escandalosa. Sobre la dueña del comercio, Silvana Jaqueline “Jackie” Oviedo, pesaba una resolución de prisión prisión preventiva efectiva dictada por un juez del fuero provincial y por razones que ahora son materia de investigación la mujer estaba en su casa.
Además de la causa por asociación ilícita, Jackie Oviedo estaba procesada con prisión preventiva en el fuero federal por tráfico de estupefacientes. Tiempo atrás, un juez le otorgó la domiciliaria, resolución que no podía efectivizarse.
A raíz de esta irregularidad, el fiscal de la Unidad de Balaceras Pablo Socca le dio intervención a la Agencia de Control Policial (ex Asuntos Internos), que detuvo a Jackie Oviedo. Y solicitó se investigue y deslinde responsabilidad penal tanto del Servicio Penitenciario, de las fuerzas federales que tuvieron la custodia de Oviedo, así como la responsabilidad de la Oficina de Gestión Judicial (OGJ), además de presentar una denuncia a la Corte Suprema.
Oviedo fue imputada y puesta en prisión preventiva por el plazo de ley (al menos dos años antes del juicio) en octubre de 2021 por integrar una suerte de subestructura de la banda de Los Monos comandada por su pareja, el recluso Pablo Camino. Una organización violenta y con poder de fuego, con influencia en los barrios Godoy, Villa Nueva y un sector de barrio Triángulo conocido como Bajo Cullen.
Según la investigación, Oviedo participó de las extorsiones de la banda, realizó tareas vinculadas a la venta de estupefacientes y se encargó de gestionar las órdenes que da su pareja desde la cárcel –pabellón 7 de Piñero– con respecto a la provisión de droga a los quioscos de droga.
La balacera que deschavó a Jackie
En la noche del martes, desconocidos tirotearon el showroom de ropa “Renata Rebeca Ind” ubicado en la planta baja del monoblock de Viamonte al 7100. Fueron siete disparos. A raíz de la agresión, el personal policial entrevistó a Oviedo. Su nombre quedó plasmado en el acta. Poco después el escándalo quedó al descubierto.
Pablo Socca, fiscal que investigó a la banda que integra Oviedo, nunca se enteró que la mujer había regresado a su casa hasta que trascendieron los datos de la balacera.
“Es una situación común que haya gente presa conjuntamente con causas en el fuero federal y en la provincia. Y lo que pasa en una causa –en este caso, una resolución de domiciliaria– no repercute en la realidad de los hechos porque sigue presa en el otro fuero”, remarcó el funcionario.
“Es una causa delicada, no puede ser que no se hayan tomado los recaudos para asegurarse que se comuniquen estas cuestiones”, dijo a Rosario3 el fiscal Socca sobre el presunto “error” de comunicación entre fueros.
Horas después de la balacera, Jackie Oviedo fue detenida por el personal de la Agencia de Control Policial. La mujer fue alojada en el Order, indicaron voceros de la ACP.
