Este jueves en la Sala Lavardén se presenta Hijas de Hipnos, una obra "híbrida" que, entre la tragicomedia y el absurdo, aborda los femicidios y la violencia interpersonal. En la trama, la Zorra y la Autora reflexionan acompañadas por una radio intermitente que replica los "casos" de mujeres asesinadas en contexto de violencia de género.
Entre citas, discursos estereotipados y registros sonoros, ambas entablan un diálogo satírico entre ficción y realidad en el que se preguntan hasta qué punto es posible tener ideas despojadas y cuerpos libres en un sistema de relaciones de poder asimétricas cuyos preconceptos construyen las capas del imaginario común. La intimidad y el encierro marcan una existencia al límite entre lo real y la fantasía
“La obra es producto de la observación de las violencias y las represiones que impone el modelo patriarcal. Lo plantemos como una obra híbrida, performática, por eso digo producto”, explicó Caro Diez, autora de Hijas de Hipnos, a Rosario3. La dramaturga coprotagoniza la pieza junto a Carla Gordillo, bajo la dirección de Natalia Camuso.
La “observación” antes mencionada como punto de partida es, a su vez, emergente de la replica de esas violencias que amplifican los medios de comunicación y que son presentadas como “noticias”.
“En la obra, el foco son los femicidios y las violencias interpersonales (explicada como la asimetría de poder que se da en los vínculos humanos) en las que esa persona con la que convivís se transforma en tu mayor peligro”, continuó Diez.
Hasta el montaje actual, Hijas de Hipnos pasó por diferentes fases: comenzó como texto para una tesis de teatro en la que intervenían cuatro personajes para luego ceñirse a dos.
“Nos adaptábamos a los espacios”, indicó Diez al tiempo que señaló que “para la presentación en el marco del 31º Encuentro Nacional de Mujeres (que se desarrolló en Rosario en octubre de 2017) ya era una obra”.
Esta tragicomedia tuvo “distintos renacimientos” que incluyeron también pasar de ser autodirigidas a contar con la supervisión de Camuso. Esa construcción en el tiempo, por capas, le permitió a la puesta cobrar una densidad particular al momento de reflexionar sobre femicidios.
“En cierto punto –continúo Diez– desmitifica la idea de es una fantasía porque es algo que está ocurriendo, pero los personajes, abrumados por la realidad, tienden a enloquecer. Esas psiques se van agrietando. Entonces, tenemos a nuestro peor enemigo adentro”.
En este ejercicio, las noticias (los audios de montaje escénico) funcionan como “nuevos y constantes puntos de partida para la trama”: “Hay algo del orden de lo absurdo porque, en la diégesis de la obra se funden delirio y humor”.
A la par de lo explicitado antes, las citas y referencias a textos académicos se cuelan en las reflexiones de los dos personajes en la deconstrucción del sistema de relaciones que las constituye: “La pregunta que recorre la obra es hasta qué punto es posible tener ideas despojadas y cuerpos libres en un sistema patriarcal donde todo está reglado. Desde dónde se puede emancipar una mujer si no es desde la propia escisión y en una instancia que supere al binarismo”.
La ficha técnica se completa con el vestuario de Lorena Fenoglio y la producción de Alita Molina.
Hijas de Hipnos se presenta este jueves a las 21 en la Sala lavardén (Sarmiento y Mendoza) en el marco del ciclo Reír, llorar, amar.
Los tickets pueden adquirirse a través del sistema entradaslavarden.com
