Las estadísticas marcan que durante la estación estival, aumentan considerablemente las consultas sobre trastornos venosos, sobre todo, en las mujeres. Por tal motivo Rosario3.com consultó con el doctor Armando Schapira, especialista en flebología.
Doctor Schapira, ¿cuál es el secreto para hacer un buen diagnóstico?
Todos los días los pacientes nos enseñan: vivimos aprendiendo. Hay que interiorizarse en la historia del paciente, para lo cual debemos escucharlos con atención y paciencia. Es parte de la atención.
Los trastornos en las grandes venas de las extremidades inferiores, ¿responden siempre a cuestiones venosas?
Los trastornos en las venas de las piernas suelen responder a cuestiones no venosas. La nuestra como muchas otras, es una especialidad en la que se necesita interactuar con otros especialistas, como con los ortopedistas, por ejemplo, ya que tiene mucho que ver y es muy frecuente que nos enfrentemos con los que llamamos “vicios de apoyo del pie”; los que provocan dolor de piernas que es uno de los motivos de mayor consulta; un dolor que en muchas ocasiones no remite a trastornos venosos ni siquiera vasculares; y allí juega un rol fundamental el ortopedista.
Porque esos vicios de apoyo del pie que pueden deberse a la escasa formación del arco del pie, o a una exagerada formación del mismo, repercuten en el sistema circulatorio de las piernas; ya que, ese mal apoyo del pie, produce una contractura muscular de la pantorrilla que afecta la circulación de retorno venoso. al no favorecer la contracción natural del músculo; lo que trae aparejado que un resto de sangre quede acumulada en una parte de la pierna, dándole al paciente sensación de pesadez, edema (hinchazón), calambres; cuestiones todas estas que no tiene que ver con afecciones venosas, sino con problemas óseos.
La circulación toma de prestado el vicio de apoyo del pie y genera síntomas que parecen de origen venoso pero que no lo son. Por eso es para nosotros tan importante contar en nuestro grupo con ortopedistas que nos ayuden a hacer diagnósticos diferenciales y corregir situaciones con los diagnósticos precisos y tratamientos adecuados.
En esta época del año se incrementan los viajes en avión, ¿qué recomendaciones les daría a las personas que tiene trastornos venosos?
Cuando se tiene várices, y se hacen viajes en avión de varias horas de duración, les aconsejamos que deben tener en cuenta que hay activar la circulación de sus miembros inferiores. ¿Cómo?, levantándose y caminando; además, tomar agua para diluir la sangre, para que la misma se mantenga fluida. Cada 20 minutos realizar inspiraciones profundas para favorecer el retorno de la sangre. Usar las medias de compresión, caminar por el pasillo cada hora y hacer ejercicios moviendo y extendiendo pies y pantorrillas.
A quienes cuentan con antecedentes de trombosis, le debemos agregar la medicación: se les inyecta una sustancia antitrombótica.