El edil Aldo Pedro Poy del Partido Demócrata Progresista (PDP) promueve que en Rosario sea de carácter obligatorio la exigencia a los titulares de estaciones de servicio, bares y restaurantes la incorporación de al menos una terminal electrónica inalámbrica de pago a fin de que al momento de realizar la cancelación del consumo de los clientes, éstos puedan hacerlo de manera visible y clara sin necesidad de entregar el plástico. De esta forma, se busca brindar mayor seguridad y transparencia y evitar posibles fraudes.
Esta iniciativa surge ante "la necesidad de brindar mayor seguridad a los usuarios de tarjetas de crédito y débito, puesto que en la actualidad cada vez son más las personas que eligen este medio de pago”, explicó Poy.
Para el edil, " el constante desarrollo de la tecnología implica un avance paralelo en la forma de cometer fraudes".
Una de las modalidades de fraude es el skimming, también conocido como clonación de tarjetas de crédito o débito, que equivale a la emisión o copia de un nuevo plástico con las atribuciones del plástico original.
Según explica Poy, "cada vez son más frecuentes las denuncias sobre personas que han sido víctimas de robo de datos de sus tarjetas, debido a la facilidad para acceder a aparatos que copian la información de las bandas magnéticas de los plásticos."
Cabe indicar que otra de las modalidades para cometer fraude se basa en el simple acto de fotografiar el anverso y el reverso de los plásticos y el DNI del cliente y usar dicha identificación para hacer compras telefónicas o por Internet.
En consecuencia, para evitar las modalidades delictivas en países como Brasil, Uruguay y Chile, para citar algunos ejemplos, hace tiempo se utilizan “posnets” inalámbricos en comercios "con el propósito de evitar de esta forma no perder de vista las tarjetas al momento de realizar los pagos", agregó.
Para el edil "es necesario adecuar los adelantos técnicos creados para proteger la seguridad y brindar la mayor transparencia posible a los ciudadanos de nuestra ciudad".